Ciudad de Mexico.- Han pasado tres años, pero la afición no olvida el escándalo por el robo de señales que protagonizaron los Houston Astros en la Temporada 2017 de MLB, en la cual ganaron la Serie Mundial ante Los Angeles Dodgers, por eso ahora los tratan "como basura" en diferentes parques de pelota.

Y para muestra el juego del lunes ante los Anaheim Angels, en el que los fanáticos locales arrojaron botes de basura al campo, como muestra del repudio que todavía genera este tema en el entorno de las Mayores.

En la sexta entrada fue arrojado un inflable con forma de bote de basura en la zona del jardín central. El duelo se detuvo por un momento en lo que sacaron el objeto, pero dos entradas más tarde, y mientras José Altuve, una de las máximas estrellas de los Astros, se disponía a batear, fue lanzado un bote de basura real. El umpire tuvo que detener otra vez las acciones hasta que el objeto fuera sacado.

Los aficionados de los Angels se fueron felices no solo por el hostil recibimiento a los tramposos, también porque su equipo ganó con un rally de cuatro carreras en la octava entrada para marcador final de 7-6, incluyendo el primer cuadrangular del 2021 para la megaestrella, Mike Trout.

Cabe señalar que los Houston Astros fueron castigados con cinco millones de dólares, luego de que se comprobara su culpabilidad en el robo de señales de la Temporada 2017 y parte de la Temporada 2018, donde también llegaron hasta la Serie de Campeonato de la Liga Americana.