•El gobernador del estado solicitó al obispo Miguel Ángel Alba Díaz cerrar los templos los días santos, en contraste permitió la apertura de playas y espacios públicos, advierten; piden los sacerdotes sea reconsiderada esta determinación y les permitan tener público
La Paz, Baja California Sur.- El pasado 4 de marzo, después de que se informara que las playas estarían cerradas durante el periodo de Semana Santa, el Ayuntamiento de La Paz a través del alcalde Rubén Muñoz Álvarez, informó que el gobernador Baja California Sur (BCS) Carlos Mendoza Davis había solicitado que las playas de la capital del estado estuvieran abiertas al público, por lo menos en un 50% de su capacidad, con la seguridad y medidas pertinentes ante la pandemia del COVID-19.
Al mismo tiempo solicitaba al obispo de la diócesis de La Paz, Miguel Ángel Alba Díaz que las iglesias de la entidad permanecieran cerradas durante los días de Semana Santa, ante un posible brote de contagios por la pandemia, según había informado el vocero de la Diócesis, Juan Gómez Esqueda.
Esta situación no agradó a casi un centenar sacerdotes que emitieron un comunicado al titular del ejecutivo para externarle su extrañeza y disentimiento por estas medidas tomadas para las fechas de Semana Mayor, las cuales les parecen incongruentes por cerrar los templos mientras se abren las playas al 50%.
“Creemos incongruente que nuestros templos, que actualmente están abiertos al 50% se cierren al 0% justo en los días más importantes para nuestra fe cristiana como es la celebración de la Pascua. Sin duda, nuestra Fe en Cristo, muerto y resucitado, nos sirve de incentivo para nuestra lucha por vivir, así como un bálsamo para tantas familias que han perdido un ser querido, víctimas de este terrible mal” informan en parte de la misiva.
Agregan que todos y cada uno de los fieles permitidos en los templos cumplen con las medidas de seguridad que su administración y la administración federal han impuesto para contrarrestar los efectos de la pandemia, mientras que los centros de diversión no pueden asegurar lo mismo.
El casi centenar de sacerdotes que han firmado la misiva, mantienen que han aplicado los lineamientos de la Coepris en relación a la sanitización antes y después de cada celebración religiosa, así como los protocolos al ingreso de los templos, advirtiendo que todos estos protocolos en otros espacios como los centros comerciales y pequeños negocios se han relajado éstas prácticas.
“Sentimos un trato desigual, y hasta discriminatorio, cosa que no creemos que sea en forma intencional, por lo que sugerimos respetuosamente que se reconsideren estas medidas, cuyo conocimiento ya está causando reacciones entre nuestro pueblo Creyente que espera de sus autoridades mayor comprensión hacia sus convicciones religiosas” pidieron.
En la solicitud a Mendoza Davis se comprometieron a evitar los eventos susceptibles de aglomeración (Vía Crucis, congresos y eventos masivos, entre ellos las pascuas infantiles, de adolescentes y juveniles) y acompañar a los feligreses con rigurosas medidas de protección, esto para continuar con los protocolos de seguridad sanitaria.
“Señor Gobernador, y autoridades de Salud, cuenten como hasta ahora con nuestra colaboración y apoyo en la lucha contra nuestro mayor problema actual, que es la pandemia que nos afecta a todos” finalizó.