La Paz, Baja California Sur. El sistema de agua de La Paz registró grandes pérdidas por clandestinaje en 2019 y 2020, esto de acuerdo con el informe del estudio de diagnóstico y planeación integral para la prestación de los servicios de agua potable, drenaje y saneamiento en el municipio de La Paz, que el Ayuntamiento ordenó a un despacho independiente.

De acuerdo con la información técnica, hay pérdidas físicas de hasta el 16 por ciento del agua extraída del acuífero y pueden aumentar hasta 48 por ciento al aplicar términos de eficiencia de la red de distribución y medición. Además del clandestinaje, se revelan otras causas de las pérdidas, como la falta de mantenimiento, las fugas y la poca medición.

Como lo informó en su momento Diario El Independiente (12 de agosto de 2020), se ha identificado que en distintos pozos del acuífero de La Paz se da una práctica que los usuarios que han denunciado y llaman “huachicol de agua”. Entre el pozo 12 y el punto entre los tanques elevados de la colonia FOVISSTE, el estudio identificó que “se ‘pierden’ [en comillas en el original] 143 litros por segundo; aunque este caudal representa tanto el gasto derivado hacia a la red, como el que se pierde en fugas y clandestinaje”.

El estudio realizó mediciones en el caudal de agua de los distintos ramales del sistema de aguas paceño. También se cuantifican "pérdidas físicas", que representan el 47.8 por ciento del caudal promedio producido anualmente en las baterías de pozos. Esto quiere decir que, de cada litro extraído, 470 mililitros se pierden por el clandestinaje, las fugas y la ineficiencia de la red.

Mientras el informe recomienda hacer otro estudio “de fugas que permita realizar un diagnóstico de la eficiencia física más acertado”, también plantea “considerar que las pérdidas por clandestinaje son demasiado altas, aún si sólo se consideran aquellas que ocurren en las zonas donde se encuentran los pozos antes de entrar a la ciudad”.

Entre otras, las pérdidas más grandes se detectan en los pozos conocidos como “pozos Hérdez”, dos concesiones de agua para uso no urbano que particulares están usando para “huachicolear” el agua de los paceños y venderla a un sistema de distribución de pipas particulares. El pozo Hérdez, que en realidad son dos, “es de particulares y desde el cual se instaló una línea de conducción para conectarse con la línea de producción del Organismo Operador, pero la línea de conducción cruza por un terreno particular cuyo propietario aprovechó para instar una ‘garza’ y no entrega información sobre los volúmenes que abastece. En el periodo del 17 al 25 de agosto se realizó una investigación y se estimó un promedio de 33 viajes, con lo que se estima un abastecimiento promedio mensual de 10 mil 151 metros cúbicos”.

El estudio no precisa cuánta agua realmente extraen, aunque el cálculo estimado es que anualmente 837 mil litros se pierden en este proceso sin regulación. El estudio cita información del Organismo Operador del Sistema de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento (OOMSAPAS) que indica que el pozo en cuestión registra un alto nivel de cloruros asociados con intrusión salina, cloruros que superan en 270 por ciento el nivel permitido por la norma oficial mexicana en la materia.