• El director de Siglo XXI por tres décadas, dice que la venta de sus acciones es un hecho consumado
CIUDAD DE MÉXICO.-El futuro de Siglo XXI está asegurado, se mantendrá la línea
editorial “sin cambio alguno”, se ratificará al consejo de administración y al
director general y, sobre todo, se conservará intacta la plantilla de 40 trabajadores.
No hay ningún cambio. Todo lo que
se ha dicho son especulaciones”, afirma tajante el editor Jaime Labastida, quien ha dirigido durante 30 años el
sello fundado en 1965. “Conservará la calidad de sus propuestas editoriales,
porque los nuevos inversionistas inyectarán recursos para que la empresa se
desarrolle aún más”.
En entrevista, el poeta responde
así a las críticas que hace una semana manifestaron unos 30 accionistas al ser
enterados por el consejo de administración que se había autorizado la venta de
las acciones de Labastida, que representan el 58.7% del total, a la empresa
Merkcent Consulting and Funding.
La venta es un hecho consumado. No puedo darle la
cantidad porque forma parte de un contrato privado”, comenta el filósofo ante
la información dada por los accionistas inconformes de que el monto fue de 7
millones de dólares.
Tengo 30 años al frente de Siglo XXI. Con esfuerzo,
poco a poco, compré las acciones que tengo a las personas que querían vender.
El consejo de administración ya avaló todas esas compras. Son el fruto de mi
trabajo a lo largo de este tiempo. No me he apoderado de nada. Quiero
retirarme, tengo derecho a eso”, agrega.
Dice que en la asamblea de accionistas que se
llevará a cabo el 19 de marzo, a puerta cerrada, se presentará a los nuevos
socios, se ratificará al consejo de administración, y al director general, y se
nombrará un comisario.
Me han pedido que continúe al
frente por lo menos un año más, para informar y adiestrar a quien será el nuevo
director, que aún no se conoce. Los inversionistas consideran que la plantilla actual
de trabajadores, desde el gerente general hasta los empleados de almacén, son
un activo económico y los conservarán”, indica.
Labastida rechaza que sea el fin
del proyecto original de Siglo XXI, que nació gracias a que intelectuales,
artistas y científicos mexicanos, entre ellos Octavio Paz, Carlos Fuentes y
Elena Poniatowska, se unieron para apoyar al editor argentino Arnaldo Orfila,
al ser despedido del Fondo de Cultura
Económica. Orfila estuvo al frente del sello de 1965 a 1987.
Yo recibí la editorial en octubre
de 1990. Lo que la gente no sabe es que estaba en quiebra. Pero de 1992 a la
fecha ha funcionado sin pérdida alguna. Actualmente es una empresa sana.
Repartimos las utilidades de 2019 en su totalidad a los trabajadores. No hemos
corrido a nadie, ni reducido los salarios, no hemos solicitado ningún
préstamo”, explica.
Añade que se le acusa de no haber
apoyado a Orfila y de haberse quedado con sus acciones y las de su esposa, que
dejó a cinco personas, 20% para cada una. “Él y su esposa vivieron en la sede
de la editorial desde 1972, cuando se construyó en Cerro del Agua, hasta 1998,
cuando él murió, o sea 22 años. Esto formaba parte de sus prestaciones; nunca
se le cobró un centavo de renta, no pagaba servicios. Y luego, su viuda vivió
seis años más ahí mismo, hasta su muerte en 2004. Si eso no es cuidarlos,
protegerlos, entonces no sé qué sea”, expresa.
El escritor aclara que no se
quedó con las acciones de Orfila, quien tenía 21 mil 414 bonos, y su esposa 2
mil 984. “Sumados daban 24 mil 398 acciones; sobre 2 millones del total,
representaban 1.2%. El 20% le correspondía a Guadalupe Ortiz, pregúntele a ella
cómo se hizo del otro 80%. Yo no tuve esas acciones en mi poder, las tuvo ella.
Hace tres años apenas se las compré”.
Destaca que todos los accionistas pudieron haber adquirido más acciones y que
si ellos no se informaron es su responsabilidad, pues se ha realizado mínimo
una asamblea al año.