• La alcaldesa de Los Cabos y la directora federal de Conagua ignoraron a representantes de la sociedad civil organizada que buscan derrumbar el muro de Costa Azul.
Cabo San Lucas, Baja California Sur. Desde muy tempranas horas del martes 2 de marzo, representantes de la sociedad civil organizada que están en la lucha social por defender y que se respete el patrimonio nacional de todos y todas las mexicanas, exigieron a las autoridades de los tres órdenes de gobierno que se derrumbe el muro de protección ejecutado recientemente en el arroyo de Costa Azul por un particular. Ante esto, la alcaldesa Armida Castro Guzmán y la directora federal de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Blanca Jiménez, quien se encontraban en un evento celebrado en el cerro de la “Z” en Cabo San Lucas (CSL), se fueron de largo al enfrentarse a las protestas, ignorando así a dos de las luchadoras sociales que esperaban a ambas funcionarias para entregar un pliego petitorio.
Dicho pliego petitorio, dirigido principalmente a la directora general federal de Conagua, exponía la situación que se vive actualmente en Costa Azul, en donde una empresa particular infringe a todas luces las Leyes, sin tener acciones concretas por parte de las autoridades municipales, además de focalizar la gran indiferencia de los funcionarios públicos locales, solicitando así que caiga todo el peso de la ley sobre el particular, así como a todos los servidores públicos que participaron y solaparon dicha “aberración” de obra.
Cabe destacar que el único funcionario que tuvo la consideración de escuchar el clamor del pueblo cabeño en voz de los activistas fue el gobernador Carlos Mendoza Davis, quien incluso no sólo ordenó parar el vehículo, sino que escuchó a la activista y empresaria Blanca Pedrín, quien le solicitó apoyo al funcionario estatal e inclusive le expuso que en todas las costas de Los Cabos se tiene una gran problemática con el acaparamiento de la zona federal marítima terrestre.
Cabe recordar que desde el pasado 21 de febrero cientos de ciudadanos se han sumado a apropiarse de los espacios públicos y bienes de la nación, tal como es el caso de Costa Azul, así como sumarse a la petición mediante la recaudación de firmas para exigir a las autoridades que derrumben ese muro de protección que, a todas luces, está dentro de la zona federal, por lo que, desde hace más de 10 días, activistas de Los Cabos han estado sin cesar en la playa de Costa Azul recabando firmas de los inconformes.