• En total, la obra cuenta ya con 5 sellos de clausura, uno de Conagua, Seguridad Pública, dos de Protección Civil, y el más reciente de Desarrollo Urbano.
San José del Cabo. Luego que el jueves 18 de febrero del año en curso, en sesión ordinaria de cabildo aprobaron revocar el punto de acuerdo que la actual administración aprobó para emitir la licencia de construcción en 2019 de un muro de protección en el arroyo de Costa Azul en San José del Cabo (SJC), e iniciaron el procedimiento para turnar el caso a la Dirección General de Planeación y Desarrollo Urbano, con la finalidad de anular los permisos y licencias de construcción, los trabajos de construcción continuaron sin parar ni un sólo día, ello pese a que ya contaban hasta el día jueves con 4 sellos de clausura: uno por parte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Seguridad Pública y Protección Civil, así como un sello para la suspensión de labores por seguir trabajando pese a las actas de esta última dependencia municipal.
Sin embargo, ante la molestia de algunas autoridades e integrantes de la sociedad civil organizada por los trabajos de construcción que nunca pararon y cada vez se ha estado percibiendo mayor avance en el muro, el viernes 19 de febrero la regidora Tabita Rodríguez expuso una serie de irregularidades en donde destacó que el desarrollador tomó metros de más hacia el arroyo, en comparación con la documentación que habían presentado en 2019 y que aprobaron en cabildo, destacando que dicha situación ya la había advertido un día anterior en la sesión ordinaria. Pero dicha situación tampoco fue un motivo para que los trabajadores y responsables de la obra pararan, aunque tenían los constantes reflectores de los medios de comunicación local encima, así como de ciudadanos preocupados por el tema.
Aunque ya se tenía bien ubicado que los trabajadores pararon sus labores en punto de las 6 de la tarde, ese viernes continuaron con la jornada laboral, misma que se estuvo documentando vía redes sociales mediante videos y fotografías que dejaban ver la maquinaria pesada, así como colaboradores, sin embargo, fue mediante el mismo canal que trascendieron los operativos que estuvieron realizando durante la noche las autoridades de Protección Civil, Desarrollo Urbano y Policía Municipal para intentar parar las labores, que “lejos de hacer valer su figura de autoridad, fue una simulación ante el pueblo”, de acuerdo a los comentarios de los ciudadanos, quienes señalaban que sólo acudían a hacer un “circo”.
Mismos señalamientos concordaron la mañana del sábado 20, al observarse que habían retomado la jornada laboral como en cualquier otro día, e inclusive abrieron una entrada alterna para ingresar a la obra, dado a que la principal la habrían obstruido con los sellos de clausura. Sin embargo, fue hasta el mediodía, cuando las autoridades de Protección Civil, Seguridad Pública y Planeación y Desarrollo Urbano se presentaron en el lugar, que las autoridades impondrían su poder, al solicitarle una serie de requisitos que acreditan que en efecto las licencias y permisos de construcción estaban vigentes y apegadas a toda legalidad, sin embargo, uno de los abogados, que portaba su vestimenta como un colaborador de la obra más, argumentó que cuentan con toda la documentación para seguir laborando, justificando además que por haber sido un día y hora inhábil, no tenían los papeles a la mano, por lo que, procedieron a levantar un acta y notificarles que debían presentarse en la Dirección de Desarrollo Urbano para presentar dichos permisos y licencias.
Pero, la cosa no paró ahí, pues el abogado del desarrollador argumentó que dicha situación que han creado las autoridades y algunos ciudadanos entorno a la obra “sólo de trata de un escándalo mediático y falso”, reiterando que cuentan con la licencia municipal para ejecutar el muro de protección. Posteriormente, la Dirección de Desarrollo Urbano colocó un sello más, sumando así 5, mismo que fue por clausura y que supuestamente, y en voz del director general de la dependencia, Víctor Hugo Green, ya no podrían laborar porque estarían cayendo en una falta más, sin embargo, todo pareció tratarse de “un simulacro”, tal como lo señalaron los ciudadanos en redes sociales, pues los colaboradores siguieron adelante con sus trabajos de construcción.
Lo más sorpresivo de todo fue que hasta el domingo 21 se les observó trabajando en la obra del muro, la cual ya lleva un gran avance y, de hecho, a simple vista y teniendo de referencia el puente que atraviesa el arroyo de Costa Azul, la obra está tomando una parte considerable del arroyo. Ante dicha situación, la sociedad civil organizada, encabezada por la empresaria y activista Blanca Pedrín, así como otras organizaciones como la asociación de surfing, estudiantes, oriundos y sociedad en general, se dieron cita en la playa de Costa Azul desde las 10 de la mañana, para sumarse al plantón y recaudación de firmas y con ello exigir a las autoridades que derriben dicho muro, argumentando que está a todas luces en la ilegalidad y que podría estar provocando serios problemas y modificaciones ambientales, especialmente, dijeron, en la temporada ciclónica, pues se está obstruyendo el cauce natural del arroyo.
Para culminar, la sociedad civil organizada señaló que sólo estarían llevando a cabo la recaudación de firmas el día de ayer, pues estarán esperando los resultados de la audiencia que les otorgó la autoridad local al desarrollador para que presente los documentos vigentes y fuera de toda irregularidad, para lo cual se les otorgó 5 días hábiles, por lo que sólo están a la espera de dicho resolutivo para evaluar las próximas acciones a tomar y evitar que se sigan cometiendo más atropellos por parte de los desarrolladores en conspiración con la autoridad y sin freno de la propia sociedad, declararon los ciudadanos preocupados por evitar más daños y atropellos al medio ambiente.