Ha decir verdad, esas ardientes y apasionadas  reacciones  ya las veíamos venir. Es decir, ya las esperábamos. Porque aun cuando en política se afirma que no existe la lógica, al menos para nosotros, era lógico suponer que los mensajes implícitos y sugeridos, --por no decir subliminales--, no se harían esperar en este candente clima político que en medio del frio invernal y de la Pandemia, nos ha tocado vivir. Todo lo cual –incluso— está reafirmando lo escrito en este mismo espacio hace solo algunas semanas.

Y es todavía más creíble cuando el primero de los mensajes surge nada más y nada menos que de labios del dirigente estatal de Morena  Alberto Rentería Santana, al decir a los cuatro puntos cardinales justamente lo que esperábamos: “va para toda la militancia de Morena y aliados, los soldados del presidente Andrés Manuel ni se quiebran ni se pandean, ni se ponen verdes por el berrinche, los soldados de la Cuarta Transformación son firmes con la causa y no abandonan la trinchera desde la que les toca hacer frente al enemigo”.

Por cierto que en esta ocasión el presidente estatal de Morena, fue más allá al decir algo muy razonable y cierto: “tal parece que están construyendo su salida del movimiento, que están apostando al privilegio y ayudando a los adversarios de enfrente a cambio de las migajas de PAN que les ofrece la derecha”.

No sé con exactitud, pero seguro estoy que cuando Rentería Santana decía esas palabras a su mente llegaban, en primer lugar, los nombres del trío satánico, --integrado por Leonel Cota Montaño, Armida Castro Guzmán y Rubén Muñoz Álvarez--, quienes, como ya lo escribí en su oportunidad, son los que le están poniendo en el camino a Víctor Castro Cosío, --el candidato de Morena a la gubernatura--, una traidora emboscada.

Lo anterior, lo corrobora Alberto Rentería Santana, cuando deja en claro que Morena, en la firmeza de la Coalición “Juntos Haremos Historia en Baja California Sur” con el Partido del Trabajo (PT), aliado histórico del Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador,  dice además: “lamentamos algunas expresiones que divergen justo en el momento de las definiciones, seguramente saben que los números no les favorecen a algunos candidatos y están preparando su salida del movimiento para irse a donde les ofrecen una candidatura, están en su derecho, pero en Morena construimos un movimiento Estatal y Nacional con la ciudadanía, no nos casamos con proyectos personales”.

Y digo con precisión que corrobora lo escrito por un servidor, porque en esa columna a la que hago referencia  escribí que: “en política, tanto la  tozudez como la soberbia, son malas consejeras. Y realmente son tan negativas, que juntas, --soberbia y tozudez--, cuando se incrustan en el alma de un ser humano y se apoderan de su cerebro, solamente conducen a rupturas y desbandadas al interior del partido de que se trate. Y en este caso, es a Morena a quien le toca bailar con la más fea”, todo lo cual lo escribí –por supuesto-- dirigido a la terna ya mencionada.

Tal vez muy molesto, sin dejar de hacer alusión al tema, el líder morenista dijo además que: “hay un pequeño grupo de aspirantes que están en la misma dinámica del 2018, jalando la cuerda hacia su lado para ver si se rompe en lo local, como lo hicieron en el 2018, cuando el partido aliado optó por ir solo en el Estado, apostando todo su capital político a un solo hombre”.

Sobre este mismo particular, luego de que a su mente llegó el nombre de otro personaje de la política local, el dirigente de Morena subrayó que: “consideramos que el resultado habla por sí mismo, es el mismo personaje que aseguró tener los números para ganar y perdió Los Cabos, por berrinches y jaloneos que llevaron a nuestro aliado a perder la oportunidad de impulsar a su militancia a posiciones dentro de los gobiernos municipales, regidurías y diputaciones locales en el resto del Estado”.

Y por tanto, hubo de aclarar: “no es justo ni para la Coalición, ni para la militancia, ni para los ciudadanos, mentir sobre los compromisos pactados, simplemente para preparar una salida, por no tener respaldo ciudadano suficiente para encabezar una candidatura”.

Es más, Rentería quiso explicar que en todo caso es un asunto interno de los partidos coaligados, y no de Morena, precisando que: “aquí se sigue trabajando con las fortalezas del Profesor Víctor Castro, Coordinador Estatal para la Defensa de la Cuarta Transformación, con las fortalezas de Morena y las fortalezas de las y los compañeros que los ciudadanos mantienen mejor posicionados en el Estado para construir la victoria”.

Ya enseguida, dejaría claramente establecido que “la militancia de Morena tiene solidez”, y que en su caso: “el PT es un extraordinario aliado”,  reafirmando por lo tanto que “la Coalición nos da tranquilidad para ganar todo con un amplio margen, pero lo que mayor certeza nos da es el voto de confianza de la Ciudadanía hacia Morena, son nuestros mejores aliados y por eso los consultamos para elegir a nuestras candidatas y candidatos”. Y remataría: “Morena, con la opinión de la ciudadanía tiene los números para ganar”.

Incluso, recordó: “en 2018 el capricho fue por el género, ahora que en el género no hay discusión  el regateo es por el candidato,  cuando el convenio de coalición es muy claro, en la cláusula 5ta establece que la propuesta de candidatura del PT va a una encuesta con las y los propuestos por morena en el Municipio de Los Cabos; es el único municipio siglado por el PT, pero la o el candidato es resultado de una encuesta entre ambos partidos coaligantes”, “¿Qué significa esto? Se preguntó al tiempo de responder: “únicamente que sin importar la militancia de la persona que vaya en la boleta, estará representando al PT”.

En síntesis, solo habremos de esperar para ver si nos asiste la razón en lo que escribimos. Más aun cuando las antenas de algunos de los aquí mencionados ya apuntan hacia otros partidos políticos y solo esperan la confirmación para irse.

Luego entonces así finalmente se cumplirá la sentencia de Rentería respecto a que: “están preparando su salida del movimiento para irse a donde les ofrecen una candidatura. Están en su derecho, pero en Morena, no nos casamos con proyectos personales”.

Cuestión de tiempo.