• Aumenta Morena posibilidades de perder municipios ante la ríspida forma de nombrar precandidaturas • Milena Quiroga es la más débil y endeble propuesta morenista a la alcaldía paceña • Prevalece la división interna ante las negligencias de la dirigencia partidista
Las posibilidades de que
Morena pierda en las próximas elecciones las alcaldías ganadas en el pasado
proceso electoral del 2018, aumentan conforme se conocen los posibles
precandidatos de este organismo político para contender justamente por las
presidencias municipales.
Baja California Sur está
conformada por cinco municipios de los cuales tres son gobernados hasta ahora
por alcaldes emanados de Morena.
Obviamente la lógica simple
radica en esperar que este partido por lo menos conserve los espacios ganados
en el pasado proceso electoral del 2108, contienda donde a presencia mediática
del actual presidente Andrés Manuel López Obrador, fue fundamental para que
este organismo político arrasara con la mayoría de estas alcaldías, así como
las diputaciones locales y federales.
Por ahora el panorama es otro
y la prospectiva al respecto, no es nada halagüeña para quienes pretenden
encabezar esta propuesta en la que todos los días quedan muestras de una fuerte
y evidente división interna que hasta ahora no tiene una figura que pueda
lograr la tan anhelada unidad.
Desde la dirigencia estatal
que encabeza el cuestionado Alberto Rentería, (quien está más preocupado por
ser candidato a diputado federal), hasta la lucha por precandidaturas a las
alcaldías y en los distritos locales para tratar de llegar al Congreso estatal.
Hasta ahora luego de que se
conoció que finalmente Víctor Castro es el virtual candidato de Morena a la
gubernatura la lucha por las precandidaturas a las presidencias municipales y
diputaciones están a la orden del día.
Por ejemplo, en el municipio
de La Paz, ya trascendió que es muy posible que Morena impulse la figura de la
diputada Milena Quiroga, actual representante del cuarto distrito local electoral
en el Congreso del Estado donde su labor legislativa ha sido literalmente
patética.
A pesar de no contar con el
consenso social, sin experiencia política ni administrativa, todo parece
indicar que los morenistas tratarán de maquillar una pésima propuesta para
relevar en el cargo al actual presidente municipal paceño también morenista
Rubén Muñoz Álvarez.
Desde luego que este partido
tiene elementos que pueden ser más competitivos que la limitada Milena Quiroga,
pero finalmente todo indica que se inclinarán por hacerla precandidata y
alguien que como diputada se perdió en sus afanes por oponerse literalmente a
todo lo que no fuera propuesto por su fracturado partido.
Para mala fortuna de los
morenistas, ya desde ahora resulta complicado suponer que la aún legisladora
Quiroga pueda construir una candidatura competitiva, lo que incluso puede
afectar en el resultado global de la votación al resto de las propuestas para
las diputaciones (de las cuales seis están dentro del ámbito paceño) y por
supuesto será difícil a través de esta propuesta, captar sufragios para las
diputaciones federales y por supuesto para la gubernatura.
En el municipio de Los Cabos
parece que Morena también tendrá dificultades para impulsar la figura de Oscar
Leggs que como parte de la negociación con el Partido del Trabajo (PT) se
pretende impulsar, por encima de la alcaldesa Armida Castro que aún intenta
registrarse ante la autoridad electoral para buscar la reelección.
Peor aún están las cosas en el
municipio de Comondú donde el morenista alcalde Walter Valenzuela dejará un
cúmulo de problemas y de negligencias que simplemente ponen en claro ya desde
ahora que para Morena, repetir la victoria en este municipio será francamente
muy difícil.
Estos tres municipios, La Paz,
Los Cabos y Comondú que ganó ampliamente Morena en las elecciones del 2018, se
ve difícil que se conserven con una victoria electoral en junio de este año.
Así que la cada vez más
evidente división morenista terminará por hacer una crisis política mayor una
vez que queden definidas las candidaturas a las alcaldías en parte por la
escasa rentabilidad electoral de algunas de las propuestas como la de Milena
Quiroga pero además también por la manera forzada y literalmente obligada en
que se pretenden establecer estas propuestas políticas poco convincentes.
Parece que ya desde ahora se
observa una debacle de Morena, salvo que de pronto alguien propicie un golpe de
timón y aplique el sentido común a la hora de registrar ante la autoridad
electoral sus propuestas.
Pero el sentido común, es
evidente que no existe en la dirigencia de este partido por lo que es muy
posible que esto la lleve a perder el poder político municipal adquirido apenas
hace poco más de dos años.
Ya veremos qué sucede.