CIUDAD DE MÉXICO.

El libro Felisberto Hernández. El diálogo con las vanguardias y las constantes de su ficción, de Panagiotis Deligiannakis, demuestra una pasión desmedida, irreverente y puntillosa por la literatura del uruguayo. Es hermanado con Borges en sus inicios. Los dos contemporáneos, son presentados por el griego-mexicano como dos caras de una misma realidad literaria, paradójica y misteriosa.

Deligiannakis vuelve a la pregunta por lo fantástico en la literatura felisbertiana y establece una relación en torno a Felisberto Hernández y una forma de lo neofantástico. Se acentúa la singularidad del raro uruguayo, al ubicarlo siempre en el límite; en la frontera; en la ambigüedad; para Deligiannakis, una “vacilación representada”. 

El yo filosófico de Felisberto Hernández es un nuevo sujeto de estudio escrupuloso, además aparece la idea de epifanía. Es evidente durante todo el libro la importancia de Husserl para la investigación y su concepto de epokhé: la suspensión, el olvido, el vacío quizá. Cómo lograrlo, es posiblemente la pregunta del libro de Deligiannakis y de la obra entera de Felisberto Hernández.

Se hace un recuento de los fracasos amorosos de Hernández en los que él jugaba un papel de sumisión. Es también señalada su resistencia al comunismo imperante.

El libro es revelador por su carácter indagativo de precisión milimétrica. La materia de trabajo de Felisberto Hernández era la escritura, las charlas concierto y su música.

Pero es su yo filosófico el misterio más blanco de Felisberto Hernández; quien parece traer de la música y de la pintura una serie de elementos atonales y abstractos que le son brindados en primera instancia por Stravinsky, y en segunda por la pintura abstracta de la escuela de Torres García. 

Al indagar esas zonas misteriosas es posible construir un libro con la profundidad y compromiso de Felisberto Hernández. El diálogo con las vanguardias y las constantes de su ficción, de Panagiotis Deligiannakis.

El libro resulta importante para todo aquél que quiera estudiar la obra del autor de Nadie encendía las lámparas.