• Con una inversión de 30 millones de pesos, se realizó durante 2020 la urgente modernización de la red eléctrica del Palacio de Bellas Artes
Ciudad de México. Con una inversión de 30 millones de
pesos, se realizó durante 2020 la urgente modernización de la red eléctrica del
Palacio de Bellas Artes. La directora de esa instancia, Lucina Jiménez, informó
en rueda de prensa que dentro de ese mismo presupuesto (otorgado por el
Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado) se llevará a cabo durante los
próximos meses el remplazo de la concha acústica del recinto.
Desde su instalación en 2010, sostuvo la
funcionaria, ese mecanismo teatral representa un riesgo para los 30 trabajadores
que deben instalar y desmontar cada vez que las funciones lo requieren, pues
pesa 31 toneladas.
El recinto cultural cerró sus puertas a
mediados de 2008, durante el sexenio calderonista, cuando se ordenó el cambio
de la maquinaria teatral original (que databa de 1908), y para instalar nuevos
sistemas de iluminación y sonido, trabajos que requirieron dos años y una
inversión final de 700 millones de pesos, cuando en el inicio se habían
presupuestado 400 millones.
Desde el principio, trabajadores del recinto
denunciaron los graves problemas técnicos que dejó el remozamiento del teatro,
cuyo escenario, aseguraron, presentó un desnivel en la parte central, de unos
cinco centímetros, debido al enorme peso de la concha acústica.
Los músicos de las agrupaciones que se
presentan en el teatro del Palacio de Bellas Artes también protestaron:
aseguraron entonces que habían transformado “un teatro de ópera serio en una
sala de burlesque” y que la concha acústica no está diseñada para adecuarse a
una orquesta pequeña.
La empresa Teletec, dirigida por David
Alexander, a cargo en ese entonces de los cambios en el foro, siempre minimizó
los problemas. Decían que el escenario “está calculado para aguantar muchísimo”
y rechazaban que existieran declives.
Otro aspecto que incomodó aun más a los
trabajadores del teatro es el tiempo que tarda la concha acústica en
desplegarse o guardarse en el sótano: alrededor de hora y media, lo cual era un
problema cuando los domingos se realizaban hasta cuatro funciones dominicales diferentes,
del Ballet Folclórico Nacional, la Orquesta Sinfónica Nacional y en ocasiones
de la Compañía Nacional de Ópera.
Los directivos de Teletec garantizaron que el
teatro del Palacio de Bellas Artes sería funcional “los siguientes 70 años” y
tras “un periodo normal de adaptabilidad, ya dejaremos al niño a cargo de su
mamá y, terminando los periodos de garantía, estaremos ahí dando mantenimiento
a los equipos”, dijeron.
Sin embargo, la millonaria implementación de
“tecnología de punta” que se hizo durante la administración de Teresa Vicencio,
entonces directora del Inbal, no contempló la modernización de la red eléctrica
del recinto, aun cuando ella aseguró que se habían sustituido las instalaciones
eléctricas e hidráulicas (La Jornada, 17 de noviembre de 2010).
Ayer, en el informe que presentó a la prensa,
Lucina Jiménez señaló que “es la primera vez en 86 años” que la red eléctrica
“recibe una atención integral que le garantizará larga vida”.
En 2017, luego de un incendio ocurrido en el
tercer piso del inmueble, aparentemente debido a un cortocircuito, se realizó
un diagnóstico según el cual eran necesarias “acciones inmediatas para evitar
fallas de consecuencias graves que pudieran poner en riesgo a las personas y al
inmueble”.
Ese informe, elaborado durante la
administración de Lidia Camacho, estimaba una inversión de 400 millones de
pesos.
Si bien el presidente Andrés Manuel López
Obrador ordenó que se utilizaran los recursos necesarios para atender los
requerimientos del recinto, en colaboración con la Comisión Federal de
Electricidad se realizó un proyecto para la modernización de la red eléctrica
en el que a la fecha se han invertido sólo 15 millones de pesos, detalló la
actual directora del Inbal.
“En este mes de enero se hará la entrega
final de los trabajos realizados durante todo 2020, sin descanso, ni sábados ni
domingos”, destacó la funcionaria.
Entre otras acciones, se dio mantenimiento y
se pusieron en servicio cinco equipos de plantas de emergencia, se
identificaron todos los centros de carga (212 tableros), de los cuales se
colocaron 90 y 3 mil circuitos electrónicos, se suministró un transformador y
se actualizaron los planos y diagramas para facilitar el mantenimiento futuro a
próximas administraciones.
La reconfiguración y optimización de todo el
sistema eléctrico ha disminuido también la facturación del suministro,
generando ahorros, además de “garantizar el adecuado funcionamiento de los
modernos equipos de mecánica teatral, audio, video e iluminación” adquiridos
hace una década.
El costo ha sido “radicalmente diferente” a
lo que se había previsto en el sexenio de Enrique Peña Nieto, insistió Lucina
Jiménez, quien explicó que la segunda etapa de la inversión que otorgó el
Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado alcanzará para sustituir la actual
concha acústica, “que no será desechada, se buscará otro recinto donde
colocarla de manera permanente; para ello, y para determinar características de
la nueva, se establecerá un diálogo con especialistas”.