• Las tradicionales roscas son horneadas en negocios de familias locales y es mejor opción que comprar en centros comerciales.
Cabo San Lucas, Baja California Sur. La euforia por una rosca de reyes este 6 de enero, puede más que cuidar la salud para evitar contagios de Covid-19. En Los Cabos los grandes centros comerciales son abarrotados por cientos de ciudadanos que buscan comprar uno de estos emblemáticos bizcochos de temporada.
En medio de una crisis sanitaria, el poder acudir a un pequeño negocio, sin filas y sin aglomeración de personas, resulta la mejor opción, para comprar una rosca de reyes. Los panes caseros o de pequeños negocios van de los 200 a los 300 pesos. Incluso son más baratos que los que se venden en un supermercado.
Con todo y pandemia, varios supermercados han alistado filas y filas de roscas en sus pasillos en espera de vender lo más posible, en un evidente escenario de mucha gente, posiblemente el 50 por ciento de aforo permitido, si en verdad se controla. A diferencia de estos “monstruosos mercados”, familias radicadas en el municipio de Los Cabos comienzan a ofertar en redes sociales roscas caseras, artesanales o simplemente diferentes a lo que vende un centro comercial de cadena nacional o internacional.
Recientemente, el líder de la Sección Especializada de Abarroteros de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) en la ciudad, Armando de la Cruz Navarrete, invitó a la ciudadanía a promover el consumo local, única forma de recuperar la economía familiar para salir adelante de la actual crisis, que es consecuencia de la situación de salud.
“Es importante, hacemos la invitación a toda la gente que radicamos en Los Cabos, que consuman en comercio local, con las tiendas de sus colonias, para que el derrame económico se quede aquí en Los Cabos, porque regularmente todos se van a centros comerciales y desafortunadamente este dinero se va a otros estados de la república”, dijo el comerciante.