• Díaz de León expone riesgos de obligarlo a captar divisas; remesas en efectivo, sólo 1% del total, asegura
Ciudad de México
El gobernador del Banco de México (BdeM), Alejandro Díaz de León,
reiteró ante los diputados de la Comisión de Hacienda que la minuta del Senado
con reformas a la Ley del Banco de México, violaría la autonomía de esa
institución. Tras escuchar al funcionario, los diputados de todos los partidos
decidieron no avalar el decreto; lo modificarán.
El
funcionario dijo que la minuta obligaría al banco central a comprar a las
instituciones de crédito todos los billetes y monedas extranjeros que éstas
capten y no puedan repatriar al país de origen. Esto sería un fuerte impacto,
adverso a las operaciones del BdeM y una violación a su autonomía
constitucional.
Por tanto,
adelantó que entregará a la Comisión de Hacienda y Crédito Público en San
Lázaro alternativas para fortalecer y mejorar los procedimientos con efectivo
en moneda extranjera.
El diputado
panista José Isabel Trejo dijo que su partido no respalda la reforma que aprobó
el Senado. Se dijo dispuesto a conocer las propuestas del banco, así como la
opinión de los especialistas del gobierno, en concreto la Unidad de
Inteligencia Financiera de Hacienda.
De
Movimiento Ciudadano, el coordinador Tonatiuh Bravo dijo sentirse preocupado
por la autonomía del BdeM, por lo cual solicitó conocer cuáles serían las
afectaciones como banca central.
Díaz de León
refirió que la minuta propiciaría la inutilidad de los billetes y monedas
extranjeros para los propósitos de la reserva de los activos internacionales;
afectaciones al balance del banco central en deterioro del cumplimiento de su
mandato. Y los activos no contarían con la disponibilidad inmediata que se
requiere para que sean usados en los fines económicos y legales de la propia
reserva, y al mantenerse en efectivo tales billetes y monedas, no podrían ser
invertidos.
Habría un
debilitamiento de los estándares en el manejo de moneda extranjera en efectivo;
traslado de riesgo al Banco de México; ninguna contraparte de Banxico aceptaría
los billetes y monedas que adquiere; la adquisición de los activos haría que el
banco pase de ser entidad pública que no representa ni tiene riesgo de lavado
de dinero a que sea clasificada de alto riesgo; violación a la autonomía
constitucional del BdeM, y habría afectaciones con el exterior.
Recordó que
la cantidad de moneda extranjera en efectivo correspondiente a remesas
internacionales, representa sólo 1 por ciento del total de las remesas, ya que
99 por ciento llega al país mediante transferencias electrónicas.
Así, propuso
establecer en la ley herramientas que el banco ha desarrollado para apoyar a
las instituciones en sus operaciones con instrumentos considerados de mayor
riesgo, es decir, con el efectivo; en particular, BdeM puede poner a
disposición de las instituciones de crédito una plataforma tecnológica que
permita verificar la información para manejar mejor los riesgos de lavado de
dinero inherentes a sus operaciones con moneda extranjera en efectivo.