La Paz, Baja California Sur. “Si vives o sabes de alguna mujer, niña o adolescente que viva situaciones de violencia, llama al 911 o acércate al Centro de Justicia para las Mujeres”, es el llamado que continuamente la Subprocuraduría de Atención a la Mujer y el Menor reitera a través de todos sus canales de comunicación. Este ha sido uno de los años más difíciles para atender la violencia contra las mujeres en el país, y Baja California Sur (BCS) no ha sido la excepción.

Asociaciones feministas, colectivas, autoridades y especialistas han reiterado que el confinamiento, la reiteración de las autoridades a eludir aglomeraciones, la tensión familiar agregada por la difícil situación económica y las clases en línea son un terrible cóctel para que se viva un verdadero infierno por quedarse en casa.

De acuerdo con los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, al cierre del mes pasado BCS mostraba tasas por arriba de la media nacional en delitos contra la libertad y el patrimonio, como en presuntas víctimas de lesiones dolosas por cada 100 mil mujeres (133.2, cuarto lugar nacional), por lesiones culposas (22.0, noveno lugar nacional) y también por extorsión (9.1 por cada 100 mil, segundo lugar nacional).

De manera similar en los delitos a la salud, como son las cifras de presuntas víctimas mujeres de corrupción de menores por cada 100 mil mujeres (6.1, segundo lugar nacional), y delitos contra la familia como presuntos delitos de violencia (263.8 por cada cien mil habitantes), donde ocupa el tercer lugar nacional.

También ocupa el tercer lugar nacional con 197 presuntos delitos de violación con una tasa de 24.5 mujeres por cada 100 mil habitantes. Sin embargo, el estado ocupa el lugar más bajo en llamados al 911 para reportar violencia intrafamiliar y de pareja; y, aunque se han reportado 27 llamadas de posibles violaciones al número de emergencia en lo que va del año, también el índice de reporte es de los más bajos del país. En este sentido, la campaña de la procuraduría estatal. Las autoridades además han puesto a disposición de la ciudadanía un número especial, el 612 688  1236, para recibir reportes de violencia directamente en la subprocuraduría.