• El vigente campeón mundial de los 100 metros planos, busca anular el castigo que le fue impuesto por saltarse múltiples pruebas antidopaje
LAUSANA
El velocista estadunidense Christian
Coleman, vigente campeón mundial de los 100 metros planos, presentó formalmente
una apelación contra el veto por dos años que le fue
impuesto por saltarse múltiples pruebas antidopaje, informó el Tribunal de
Arbitraje Deportivo el jueves.
El TAS también recibió una apelación de World Athletics, el
organismo rector del atletismo mundial, contra el fallo que absuelve a la
campeona mundial de los 400 metros planos, Salwa Eid Naser, a
causa de un tecnicismo pese a que enfrenta cargos similares a los de Coleman.
Los veredictos en los casos por separado tendrán un
enorme impacto en
dos de las pruebas más esperadas en los Juegos Olímpicos de Tokio el año
próximo.
Coleman busca anular un veto de dos años que recibió el
mes pasado de parte de un tribunal independiente de la Unidad de Integridad del
Atletismo.
El velocista estadunidense acumuló tres de las llamadas
“fallas de localización” —se perdió pruebas antidopaje o no actualizó
detalles sobre el lugar donde los oficiales de recolección de muestras podrían
hallarlo— en un periodo de un año para reflejar una violación por dopaje.
Coleman solicitó que su veto, que actualmente descarta su participación
en los Juegos de Tokio, “sea eliminado, o en su defecto, reducido”, indicó el
tribunal en un comunicado.
El corredor de 24 años había evitado previamente un veto
antes del mundial de atletismo de 2019 en Doha, Qatar, cuando se vio favorecido
por el mismo tecnicismo luego usado para absolver a Naser.
En el caso de Naser, World Athletics apela la decisión
que el tribunal tomó el mes pasado al dejarla libre de sanciones.
Si bien la ciudadana de Bahréin, aunque nacida en
Nigeria, tuvo tres incidentes de localización en un periodo de 12 meses, ellos
técnicamente contaron como si se registraran en un periodo supero al año.
World Athletics ha pedido un veto de dos años para Naser,
indicó el TAS, agregando
que los casos ahora están en manos de los respectivos paneles de jueces
asignados.
El TAS suele tomar varios meses para tramitar y resolver
una apelación, pero las decisiones pueden apurarse si las partes se ponen de
acuerdo.