• “Yo me deslindo y que cada poder asuma su responsabilidad", pero que no se cancele la democracia participativa
Ciudad de México
El presidente Andrés Manuel López Obrador
anticipó que si la Suprema Corte de Justicia de la Nación
no aprueba la consulta popular sobre la posibilidad de enjuiciar a
cinco ex mandatarios “yo me deslindo y que cada poder asuma su responsabilidad,
en este caso el poder judicial”. Anticipó que plantearía que el artículo 35
constitucional, que establece el derecho del pueblo a ser
consultado, “es una simulación, letra muerta” y presentaría una iniciativa de
reforma para que no se cancele la democracia participativa.
En la víspera de que la Corte discuta el
proyecto del ministro Luis María Aguilar, que plantea declarar inconstitucional
la consulta, López Obrador pidió a los ministros que hoy recojan el sentimiento
de la gente, aplicando preguntas. “Si no se puede hacer con el rigor
metodológico de una encuesta, que lo hagan con algunas entrevistas, con gente
de la calle”.
También, “que tomen en cuenta cómo es que en
15 días, ciudadanos reunieron dos millones de firmas. ¿Qué está indicando este
hecho, si se tiene sensibilidad? La gente quiere ser tomada en cuenta,
independientemente del tipo de consulta. Es algo inédito”, agregó, que se
obtuvieron esas firmas “sin dinero, sin patrocinadores, sin medios de
comunicación haciendo promoción, sin la participación de partidos, ni del
gobierno. Se corrió la voz y por las redes, y todo mundo ayudando”.
Insistió que estamos ante un hecho muy
importante y “ya no se podría hacer una movilización porque la jefa de Gobierno
no lo permite por la sana distancia, pero además ya no hay tiempo. Conozco la
opinión de mucha gente, si se convocara sería una cosa de muchísima
participación porque la gente sí quiere ser tomada en cuenta, no quiere ser
ciudadano imaginario”.
Afirmó que lo que ocurrirá mañana en la Corte
será muy interesante porque “se va a resolver si se acepta que en los hechos se
aplica la democracia participativa”. Los ministros deben definir si “nos
quedaremos limitados en la democracia representativa” o realmente damos un paso
adelante para que el pueblo en todo momento decida la forma de su gobierno, que
es la esencia de la democracia, lo que establece el artículo 39 de nuestra
Constitución”.
Es muy sencillo de explicar, sostuvo: “se
quiere que el pueblo sólo vote cada tres, cada seis años para tener representantes
o se quiere que además el pueblo pueda ser consultado cuando se trate de
asuntos trascendentes, de todo aquello que tiene que ver con el interés
general”.
Afirmó que esto va más allá “del margen
estrecho de la legalidad y no deja de ser legal. Lo aclaro porque está en el
artículo 35 constitucional: derecho del pueblo a ser consultado”.
Insistió que si la consulta se aprueba, no
significa que con juicios sumarios se va a castigar a los ex presidentes “si se
les encuentra culpables. Son procesos, y va a intervenir la Fiscalía (General
de la República), los jueces; queremos que se aplique un auténtico Estado de
derecho, pero que ya no haya impunidad, que se castigue por igual a todos. Que
no haya privilegios”.
El presidente reiteró que “esgrimir que si se
lleva a cabo una consulta se violan los derechos humanos de las personas, es un
asunto que no debe considerarse como argumento fundamental, porque no hay
violación de derechos humanos”.
La pregunta que presente en la solicitud de
la consulta, recalcó, establece con mucha claridad que en caso de que el pueblo
decida que sean juzgados los ex presidentes “se actúe de conformidad con los
procedimientos legales; que se aplique lo que se conoce como el debido proceso.
Esto es, que los acusados tengan el derecho a la defensa y que no se les violen
sus garantáis. Así de claro”.
Pero “si resulta que por eso no se puede
llevar a cabo la consulta, tendríamos que plantearnos dos cosas: una, ¿para qué
está ese artículo en la Constitución, es una simulación, es letra muerta y
olvidarnos de eso?, no. Sí diríamos eso, desde luego, pero yo tengo la
responsabilidad de buscar que en México haya democracia
participativa”.
Mi compromiso, sostuvo, es que se lleven a
cabo la consulta ciudadana y otros métodos democráticos: plebiscito,
referéndum, revocación de mandato. Y de inmediato “estaría enviando una
iniciativa de reforma al 35 para que no se cancele esta
posibilidad”.
López Obrador mencionó que fue muy vergonzoso
que en el gobierno anterior, “cuando ha quedado de manifiesto la entrega de
sobornos para aprobar la llamada reforma energética”, se solicitó una consulta,
y los ministros decidieron que no procedía porque se afectaban las finanzas
públicas, cuando lo que sucedió fue exactamente lo contrario con la aprobación
de esa reforma: se afectaron las finanzas públicas y se arruinó la industria
petrolera y la eléctrica”.