La Paz, Baja California Sur. La celebración de un evento social no permitido por los protocolos sanitarios reforzados en la Mesa Estatal de Seguridad en Salud, fue el tema de conversación de cientos de sudcalifornianos en redes sociales. Y es que, lo que en redes sociales fue tratado como la #coviboda, se trató de la celebración nupcial del hijo de Héctor Jiménez Márquez, quien el sábado pasado renunció a la titularidad de la Secretaría de Educación Pública (SEP).

Capturas de pantalla y videos que compartían los invitados a la boda del hijo de Jiménez Márquez, en club de golf de un exclusivo resort paceño, circularon en redes sociales causando el estupor de los adversarios políticos del panista. No faltó quien defendió la unión Héctor Jiménez Jr. y su pareja, por considerar que los ataques se hacían desde el prejuicio de la homofobia.

Sin embargo, e independientemente de las preferencias personales, el banquete con más de 200 invitados, pista de baile, juegos pirotécnicos y otras amenidades que continuaron hasta altas horas de la noche no pasó inadvertida por una sociedad sudcaliforniana que lleva más de 7 meses sujeta a estrictas medidas que sancionan eventos sociales, reuniones públicas, centros nocturnos y otros espacios de convivencia que son vigilados de forma intensiva por la Comisión Estatal para la Prevención de Riesgos Sanitarios (Coepris).

Versiones que no han podido ser confirmadas por Diario El Independiente, plantean la presencia de las autoridades en el exclusivo lugar donde se llevaba a cabo la celebración y hasta un posible berrinche de los celebrados ante la intención de cancelar la celebración. Sin embargo, al tratar de confirmar tales versiones con la titular de la Coepris, Blanca Pulido Medrano, ésta evitó tomar nuestra llamada y se limitó a contestar por medio de un escueto mensaje: “Lo siento, no puedo hablar ahora”.

En las fotos hechas públicas de la boda celebrada el viernes 23 de octubre, se ve que, luego de bajar una escalinata iluminada por medio de pirotecnia, Héctor Jiménez Jr. y su pareja son vistos abrazando a amigos y familiares en el momento de la celebración, sin guardar distancia alguna y sin usar equipo de protección personal para el efecto.

Tratamos de contactar a Jiménez Márquez, quien precisamente anunció su separación de la SEP estatal. En la última entrevista que logró realizar con él este medio, él afirmó que sí renunciaría, pero que lo haría para ir “por la grande”, es decir que intentaría competir por una candidatura a la gubernatura (Diario El Independiente, 10 de octubre 2020), sin embargo, al cierre de esta edición su teléfono personal no toma nuestra llamada.

“Jiménez renunciando para un cargo político, cuando es bien sabido que jamás hizo algo por ayudar a los maestros; el hijo menor cobrando doble plaza; y el hijo mayor actuando irresponsablemente haciendo fiesta ¡en época de COVID!”, expresó una usuaria en redes sociales al ver imágenes de la celebración.

“Creo que la ‘censura’ de la boda no es porque los novios sean homosexuales. El único problema es que se hace un evento masivo sin medidas de seguridad en higiene. Estamos en medio de una pandemia”, opinaban.

“¿Acaso es el hijo del ex secretario quien tenía dos plazas que se le teletrasportaba a otro municipio y estaba en el GUM con doble plaza?” preguntaba otro equivocado, pues quien celebró el viernes pasado fue el hijo mayor del exsecretario y no Isaac Jiménez Peñaloza, quien aún ostenta cargos en la SEP.

“No hagan fiestas particulares, porque luego se van convertir en funerales”, advirtió en días pasados el secretario de Salud, Víctor George Flores, quien instó a la sociedad a suspender celebraciones en tiempos tan sensibles como los que vive el estado donde más de 611 familias han pedido a un ser en los últimos meses sólo por la enfermedad pandémica.

La “sobremuerte” en la entidad, es decir la muerte más allá de las expectativas estadísticas, supera años anteriores, según estudios de la Secretaría de Salud Federal, con un 38.7 por ciento.