La Paz, Baja California Sur. Un grupo representativo de elementos de la Policía Estatal de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE), llamó la atención al Gobierno del Estado y pide la renuncia de su comisario, el profesor José Luis Esquivel Sánchez. Los elementos dijeron representar a casi 900 integrantes de la fuerza pública que se dicen sometidos a una comandancia que no reconoce su valor, actúa con opacidad y no aplica los criterios de homologación en la aplicación de los recursos que la federación asigna al estado para el mejoramiento de las corporaciones de seguridad.

Los elementos inconformes dijeron a Diario El Independiente que, al participar en una ceremonia de grados, vieron cómo los elementos que recibieron un ascenso fueron determinados bajo criterios que consideran opacos.

“Se nos hace una falta de respeto para nosotros, a nuestras familias, y que hayan manipulado las cosas de tal manera”, dijo un elemento que, aunque omitió identificarse, aseguró que decidió no asistir a un evento de entrega de grados celebrado precisamente el día de ayer por parte de las autoridades estatales.

“Se manipuló la información, se ocultó información y se tergiversa la verdad” denunciaron detrás de tapabocas y sin identificarse. El grupo indicó que los elementos con la más alta preparación, con posgrados, con perfiles intachables, no son favorecidos con ascensos, otorgados por las autoridades para favorecer a personas de la confianza de los mandos en la SSPE.

Consideran esto “un engaño” de parte del estado hacia el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, que es la instancia encargada de avalar estos rangos en cumplimiento a la normatividad de nivel federal. Los ascensos, dijeron, “fueron para las personas que tienen algún cargo de confianza. Pensamos que el subcomisario, profesor José Luis Esquivel Sánchez. tuvo mucho que ver, porque su grupo de trabajo fue incluido en esas designaciones”, acusaron, al decir que no entienden cómo un comisario puede movilizar influencias para favorecerse.

“Soy pionera de la de la policía estatal y hoy no se me llamó para conocer el grado que ostento, siento que como mujer están menoscabando mis derechos, me siento discriminada”, denunció otra de las manifestantes.

“Esta persona ha movido las piezas para él y sus compañeros”, agregó otro de los elementos policiales. “Tenemos compañeros que merecen más, pero como somos del área de operaciones no contamos, mientras que los que son administrativos, secretarias, que se encargan del parque, ahora van a ser los mandos”.

Los elementos inconformes, dijeron que se dirigen hacia las instalaciones del Gobierno del Estado buscando la atención del gobernador Carlos Mendoza o de la Secretaría General de Gobierno. No escatimaron en seguir un procedimiento legal: “vamos a poner quizá una queja ante Derechos Humanos o una denuncia penal, porque existe el delito de servidores públicos contra las administraciones, y también tráfico de influencias”.

Los funcionarios hicieron un llamado específico a Leonel Efraín Cota Montaño, secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, para que en la administración federal revise el contexto respectivo y “que se entere de esta situación y tome cartas en este asunto, para que se entere que en su tierra, en Baja California Sur, están haciendo algo nefasto”.