La Paz, Baja California Sur. La directora del Instituto Sudcaliforniano de la Juventud (Injuve), Alejandra Varela Gutiérrez, afirmó que la oportunidad política para que los jóvenes menores de 25 años tengan asegurados espacios en las fórmulas electorales como candidatos a elección popular representa una oportunidad para que la juventud sudcaliforniana muestre su capacidad para asumir cargos por la vía democrática.

A mediados de este mes, el Instituto Estatal Electoral (IEE) hizo públicas modificaciones al reglamento que todos los partidos políticos deben seguir para seleccionar a las personas que serán candidatos o candidatas a cargos de elección popular con adiciones que además de garantizar la paridad de género obligan a cada partido político a postular a un número determinado de candidatos que sean personas discapacitadas, indígenas o jóvenes menores de 25 años.

En Baja California Sur (BCS) hay cerca de 226 mil jóvenes que tienen entre 12 y 29 años de edad, informó Varela Gutiérrez, quien detalló que aproximadamente el 20 por ciento, 45 mil 200 personas, de esos jóvenes cumplen con el requisito para ser electos candidatos.

De este 20 por ciento, “debemos hablar de que 7 de cada 10 jóvenes dicen tener poco o nulo interés en temas de la agenda pública”, apuntó, al citar información de la encuesta “El perfil del joven sudcaliforniano”. levantada recientemente.

“He reiterado que este desinterés es porque durante muchos años se da exclusivamente el voto como la calidad de la herramienta de participación ciudadana”, algo que, consideró, “es un estigma que debe ser eliminado a través de alfabetización política”.

“Se requiere que los jóvenes tengan un conocimiento pleno de lo que representa la ciudadanía, ofreciendo otras herramientas como la propuesta de iniciativas a los legisladores, en ejercicios como el Parlamento de la Juventud”, que precisamente está por celebrarse en el mes de noviembre.

Otro aspecto, apuntó Varela Gutiérrez, es la capacidad de organización. “El promedio en México de participación en organizaciones de la sociedad civil en México es casi cero”, algo que comparó con otros espacios: “hay otros medios de participación, no exclusivamente el voto generaría jóvenes más integrados a la agenda pública”, planteó.

Por otro lado, está la discriminación hacia la juventud como inexperta, “no se ha dado un trabajo que permita información tangible sobre el tema de la violencia política hacia la juventud, y esto nos habla de cómo aún no genera interés el tema. Sin embargo, por experiencia personal, te puedo decir que sí existe. Así como existe (la violencia política) en razón de género, también existe también en un tema etario”, algo que se puede justificar, indicó, ante un tema que apenas se está dando desde una normatividad que reconoce la necesidad de la aportación de las juventudes.

“Si realmente estamos dispuestos a cambiar con este relevo generacional que nos espera con las elecciones del 2021”, planteó Varela Gutiérrez, es algo que tendrá efectividad en la medida en que los jóvenes ofrezcan una posición diferente de hacer política.

“La cuota población de la juventud, bajó, ocupamos sólo un 25 por ciento de la población joven, estamos dejando de ser jóvenes y estamos dejando pasar una generación que puede proponer, que puede cambiar el rumbo de las cosas y por no querer estos cambios en pro de la inclusión se podría dejar de escuchar a toda una generación perdiendo la oportunidad de crecer como país”, añadió.

Los jóvenes ven la necesidad de cambios en materia ambiental, modelos económicos, la política nacional: “somos el estado más joven del país, esto trae consigo una ventaja, pues podemos ser el estado donde los jóvenes nos demos a notar”, anticipó.