San José del Cabo, Baja California Sur. - Ante la complicada situación económica que todavía enfrentan familias ante la pandemia de COVID-19, es que muchas de ellas han optado por la venta de comida en la vía pública y sin contar con permisos correspondientes. 

Incluso, dentro de estas actividades en las que familias buscan aminorar los impactos de la crisis se presentan casos en los que se obstruyen banquetas o se generan problemas para transitar en las calles, además de que algunos vendedores se instalan en áreas o sitios no apropiados para ello. 

Sobre esta situación el jefe de Inspección Fiscal en Los Cabos, José Manuel Márquez Ceseña, indicó que diariamente se realizan recorridos de verificación para el control y regulación de la venta ambulante de comida. 

Señaló que efectivamente esta actividad ha repuntado durante los meses de la pandemia y principalmente las ventas tienen que ver con “hot dogs”, tacos, frutas y verduras. 

El funcionario, aseguró, que más allá de aplicar sanciones o multas cuando se detecta a personas realizando el comercio ambulante sin autorización se les invita a que soliciten los permisos correspondientes para dicha actividad, y, si se percibe que estén obstruyendo la vía pública o áreas de movilidad peatonal se les hacen las indicaciones pertinentes. 

“Una vez más el llamado para los comerciantes a cumplir con todo lo estipulado por las autoridades. Todos los días estamos haciendo verificaciones para controlar regular este y otros tipos de comercios pueden operar siempre y cuando saquen sus permisos correspondientes, la intención no es aplicar multas, sino primeramente orientar a que la actividad que estén realizando debe estar regulada” expuso el jefe de Inspección Fiscal