• El poeta chileno fue galardonado con el XXIX Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana
CIUDAD DE MÉXICO.
La poesía es la esperanza de
quienes no tienen esperanza y una luz para los que no encuentran una respuesta.
La poesía es muchas cosas. Lamentablemente, por ahora, sólo le queda narrar las
desgracias de nuestro tiempo”, dice a Excélsior el
poeta Raúl Zurita (Chile, 1950), luego de que recibiera la noticia de haber
ganado el XXIX Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana.
El anuncio del premio, considerado
el más importante del género en lengua española y dotado con 42 mil 100 euros
(poco más de 1.1 millones de pesos), fue realizado a través de YouTube, desde
el Palacio Real de Madrid, con el cual se distinguió la obra y el ejemplo
poético de Zurita, un vate que se ha sobrepuesto al dolor con versos, con
palabras comprometidas, con la vida, la libertad y la naturaleza, para
convertirse en el tercer autor chileno que recibe el galardón, sólo después de
Gonzalo Rojas y Nicanor Parra.
Vía telefónica desde Chile,
Zurita, quien recién cumplió 70 años, insiste en la poesía como un registro que
también posibilita
un aprendizaje para el ser humano. “La poesía tiene muchas
cosas que me gustaría haber dicho, pero al relatar lo que vivimos, tenemos la
posibilidad de que eso no vuelva a repetirse, aunque es cierto que vemos cómo
todo se repite, de distintas formas, y vuelve a repetirse. Sin embargo, la
poesía es una luz incansable que nunca debemos negar”.
Confinado en su casa de Chile, el
autor de Anteparaíso, Purgatorio y La vida nueva afirma
que este premio no es un galardón para llenar el ego de un autor, sino una
distinción para la poesía chilena e iberoamericana.
Podemos decir que es un premio al
servicio de la poesía chilena y de la poesía iberoamericana en general. Este
premio se puede entender como eso, donde el poeta es un pocito, un río, una
avenida, donde nos encontramos y nos abrazamos en la poesía, a través de los
ríos de la poesía. Tomo con alegría este premio, pero en este sentido puedo
decir que la poesía es otra cosa misteriosa”.
Y en ese río, reconoce la vigencia y su
devoción por la poesía de Pablo Neruda, Gabriela Mistral,
Nicanor Parra, Hernán Rivera Letelier, Enrique Lihn, Gonzalo Rojas, Octavio Paz
y Jaime Sabines.
La poesía es un río mucho mayor
que uno mismo, en el cual uno sólo navega y navega en los ríos de otros poetas
que nos han enriquecido. La verdad es que ahora no estoy leyendo mucho, sino
que estoy escribiendo, pero la poesía es una lucha contra lo que no quiere ser
dicho, contra lo que no tiene palabras. Es una lucha permanente”, reconoce el
poeta que fue torturado durante la dictadura de Augusto Pinochet.
Zurita, quien es un autor asiduo
a las ferias del libro mexicanas, confiesa que no ha dejado de lado su batalla encarnizada
y permanente por la dignidad de las palabras y adelanta que trabaja en un libro
de memorias, el cual verá la luz en 2021, aunque no lo quiso definir como una
autobiografía.
Es difícil de explicar. Sólo sé
que es un libro que se publicará en 2021 y que estará lleno de recuerdos”.
¿Cómo ha vivido este año? “He
pasado encerrado todo el año, viendo cómo (el covid-19) afecta a los más
pobres, a los más desvalidos. Es aterrador, es de una injusticia
indescriptible, y en el río de anécdotas, encontramos unas peor que otras. Es
algo desgarrador. Yo puedo estar bien, en mi casa, donde nada me falta, pero no
dejo de pensar en todos los que tienen que salir para poder comer. Esa miseria
es un sistema que muestra lo oprobioso e injusto que es y hasta la denuncia me
aterra, me apena y me duele”.
Es más, “me atrevo a decir que la
pandemia, tal como la estamos viviendo, muestra lo que somos en conjunto, por
supuesto, podemos hablar de héroes (como los médicos) y es impresionante y
conmovedor. Hay actos conmovedores también. Pero del lado del sistema no puede
haber un gobierno o una nación que se conforme con estar bien por los que están
bien. A simple vista se nota esa injusticia y esa desigualdad”, añade.