Cabo San Lucas, Baja California Sur. Posterior a las lluvias de temporada registradas en el municipio de Los Cabos, empresarios y locatarios denunciaron que los registros donde se encuentran instalaciones de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) estaban inundados. Tal como lo informamos en tiempo, el problema no es reciente y ocurre año con año, pero cada vez el riesgo es mayor.

Posterior a la denuncia, el problema continúa y se torna peligroso, pues el agua negra empozada, de acuerdo con la Asociación de Empresarios de Los Cabos, sería un causante de explosión. Peor aún, Carlos Tinoco Balderas, presidente de la asociación, advierte que de ocurrir un accidente como tal, la imagen del destino como una ciudad segura estaría en riesgo. 

“Es una bomba de tiempo y puede generar una explosión en la que quien esté cerca puede salir dañado. Si fuera una persona extranjera, todo el destino estaría en riesgo de que nos califiquen, nos pongan una alerta roja para que la gente no venga”.

El problema escala de malos olores, que ya provocan que turistas no se queden en los comercios, a un problema de seguridad ante nuestro principal mercado emisor: Estados Unidos de Norteamérica. De acuerdo con los empresarios, tienen contabilizados al menos ocho registros afectados a lo largo de todo el Par Vial de la zona turística de Cabo San Lucas. 

“Tantito pretexto quiere el Gobierno de Estados Unidos para alertar a sus ciudadanos y entonces, ojalá con estas declaraciones, con los oficios que vamos a ingresar a las diferentes instancias, se le dé el interés debido y la solución. Debe detectarse de dónde vienen las aguas negras que se filtran en el Par Vial en ocho registros que dan a los ductos donde corren los cables de energía eléctrica”, advirtió el empresario en entrevista con Diario El Independiente. 

Concluye la asociación que, sea el nivel de gobierno que sea, o la autoridad competente, alguien tiene que hacerse responsable del problema y ponerle una solución integral antes de que ocurra una tragedia.