• Puntualizó que la Secretaría de Salud recibió las propuestas de 11 gobernadores, así como un texto general a nombre de la Conago
Con el propósito de lograr un equilibrio
entre las medidas sanitarias y la reactivación económica, el gobierno federal
replanteará y complementará la estrategia para la segunda etapa o fase
B de la pandemia.
Así lo informó ayer a los gobernadores el
subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, al
aclarar que el plan a futuro es porque existe la perspectiva de que la pandemia
sea larga, inclusive de dos, tres o más años, y no por un
arrepentimiento de lo ya vivido durante la primera etapa.
Le llamo así, lado B, para dejar sumamente
claro que en la revisión de lo que hemos hecho hasta el momento identificamos
elementos que nos permiten concluir que ha sido acertado el manejo desde estos
primeros cinco meses en México y compatibles con las recomendaciones y
estándares internacionales, de manera directa de la Organización Mundial de la
Salud, dijo.
Igualmente puntualizó que la Secretaría de
Salud recibió las propuestas de 11 gobernadores, así como un texto general a
nombre de la Conago, para la operación del semáforo epidemiológico, las
cuales se han atendido a 100 por ciento y serán analizadas la semana
entrante en el Consejo Nacional de Salud (Conasa).
El titular de la Secretaría de Salud, Jorge
Alcocer, dijo a los gobernadores que los médicos, en el marco de la Conasa
–instancia en la cual participan los secretarios de Salud de los estados–
deberán hacer precisiones de cara a la nueva fase de la epidemia.
En cuanto al semáforo, López-Gatell añadió
que la intención es mejorarlo, a partir de los resolutivos técnicos, y de las
aportaciones de los gobernadores. El proyecto será presentado al presidente
López Obrador para tener su visto bueno, dijo.
Previamente, la secretaria de Gobernación,
Olga Sánchez Cordero, hizo comentarios acerca de la petición de autoridades
locales para que el semáforo (de medición de riesgos y clasificación de
actividades esenciales) no sea obligatorio sino de naturaleza más orientadora o
indicativa.
En principio, el subsecretario López-Gatell
explicó que es extraordinariamente difícil predecir la fecha de término de la
pandemia, sólo se sabe que algunos escenarios identifican dos, tres o más años
de duración con retornos, rebrotes, reingresos o repuntes en todos y cada
uno de los países, e incluso, en cada nación, a nivel regional.
Reiteró que en México la emergencia se
prolongará cuando menos hasta octubre, pero concurrirá con la estación de
influenza y con posibles nuevos casos de Covid-19.
Acorde con el material de la reunión al que
tuvo acceso este diario, el subsecretario fue enfático en cuanto al carácter
indispensable de replantear el lado B o la segunda etapa de la respuesta a
la epidemia, y hacer otros abordajes complementarios, a partir del
análisis de integrantes del gabinete.
En síntesis, explicó, se necesita encontrar
otros elementos para un mejor equilibrio entre la parte de protección directa
de la salud que básicamente se orienta a disminuir la probabilidad de
contagios, casos, ocupación hospitalaria y muertes, contra la revitalización de
la economía y de la vida social.
Durante la sesión de la Conago y funcionarios
federales se brindó un minuto de aplausos por las víctimas de la pandemia.