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Hoy es sábado, 23 de noviembre de 2024

Leonardo Aldino y Pablo Martínez irrumpen voces clásicas

• Los ganadores del Concurso de Composición Musical Salvador Contreras hablan de sus obras

Leonardo Aldino y Pablo Martínez irrumpen voces clásicas

CIUDAD DE MÉXICO.

Inmersos en la atmósfera del covid-19, dos compositores que empiezan a ganar un lugar en la escena musical de México, crearon dos obras ligadas al día y la noche, a la literatura de Clarice Lispector, Rosario Castellanos y a ciertas evocaciones del apocalipsis y la esperanza.

Ellos son Leonel Aldino Desena (Oaxaca, 1996) y Pablo Martínez Teutli (Ciudad de México, 1992) autores de Vislumbres del alba y Mosaico de esquirlas, obras con las que ganaron el Concurso de Composición Musical Salvador Contreras 2020, en las categorías de Música de Cámara y Música para Orquesta, respectivamente.

En entrevista con Excélsior, ambos compositores hablaron sobre su proceso creativo, el significado de sus obras, las atmósferas que describen, sus influencias y la relación que mantienen con la música de concierto.

 

UNA LOCA

El primero en hablar es Leonel Aldino Desena, quien afirma que este premio “significa un parteaguas en mi creación, porque implica que mi música será tocada ante un gran público y es algo que me interesa con la música contemporánea, que cada vez sea más difundida y que más personas puedan escucharla”.

Explicó que Vislumbres del alba es una obra para cuarteto de cuerdas que tiene una duración de 12 minutos, la cual abreva de los compositores clásicos y de la tradición del cuarteto, la cual fue ensayada con el Cuarteto de Cuerdas José White en Aguascalientes. Y, a partir de ese punto, dedicó 18 meses para terminarla.

Yo no podría decir que la obra habla sobre un tema específico, porque la música es independiente de cualquier explicación, pero sí podría decirte que tiene tres movimientos, que cada uno está dedicado a una mujer que admiro y que describe un recorrido del anochecer hasta el alba”.

Detalló que “el primer movimiento se titula Como una loca, la noche mentía, está dedicado a Clarice Lispector, –que este año celebra el centenario de su nacimiento–, una autora que adoro y de la que he extraído un pequeño fragmento de su libro La lámpara”.

El segundo movimiento es Apelación al solitario está dedicado a la poeta Rosario Castellanos, “otra de mis autoras favoritas, a partir del verso homónimo, donde escribió: “¿Cómo podrías estar solo a la hora / completa, en que las cosas y tú hablan y hablan, / hasta el amanecer?”, que funciona como reflexión en medio de la obra; y un tercer movimiento que está dedicado a mi mamá, Neigra Desena Rasgado”.

¿Qué busca en esta relación entre escritoras y su trabajo?, se le pregunta. “Me interesa su proceso de escritura. Ellas en las letras y yo en mi música, creo, es un proceso sensible y delicado que puede ayudarme en mi propio proceso”, abundó.

Aldino Desena detalló que para componer esta obra debió revisar la música de Haydn, Beethoven, Schubert y después confrontarla con los nuevos clásicos. “Como dice el maestro Mario Lavista, Claude Debussy, Arnold Schönberg y Maurice Ravel son nuestros nuevos clásicos y creo que aquí hay una revisión histórica de estilos y géneros, pero hoy es muy difícil hablar sobre el estilo de la música contemporánea. Al menos, mi música se nutre de todos estos”, concluyó el compositor que también recibió una mención honorífica en el Concurso de Orquestación Leona Vicario.

 CIUDAD ROTA

 Martínez Teutli habló sobre Mosaico de esquirlas, una obra de 16 minutos aproximadamente, compuesta a partir de una sociedad o de una ciudad de cristal que ha sido destruida, desde la cual se reconstruyen valores como la solidaridad, la amistad y la colectividad.

La propuesta de mi obra es que todas esas esquirlas de la destrucción nos ayuden a crear un mosaico renovado. Ésta corre sin movimientos ni divisiones, pero podríamos ubicar seis partes con un discurso continuo, porque siento que eso me ayuda a la continuidad de las narrativas que propongo”, detalló el autor que ha sido influenciado por los ballets de Ígor Stravinski, que en 2016 fue becario de la Cátedra Extraordinaria Arturo Márquez de Composición Musical y cuya formación ha sido guiada por Lucía Álvarez, Arturo Márquez, María Granillo y Ken Ueno.

¿Cómo ha enfrentado el confinamiento? “Soy muy optimista, entonces procuro dirigir todas las reflexiones que hago hacia ese ánimo, porque a veces esas imágenes más negativas pueden ser muy útiles o potenciar muchas ideas creativas”. 

Y abundó: “Mi experiencia en la pandemia ha sido desalentadora en muchos aspectos, así que intento mantener una actitud de esperanza y optimismo. He tenido tiempo para escribir esta obra y dos más. Espero que alguna de éstas pueda ser estrenada, debido a que por ahora están cerradas las salas de concierto y los auditorios”.

Sobre el premio, el compositor egresado de la Facultad de Música de la UNAM comentó que éste representa un paso más en su camino por la música de orquesta, “porque he tenido la fortuna de estrenar unas cuantas obras y es fantástico, pero siempre te quedas con esa sensación de volver a un ser estrenado… pero este premio es una garantía de que volverá a suceder y estoy contento”.

¿Qué compositores son los que habitualmente escucha?, se le cuestiona. “Es difícil hablar de un compositor o de una fuerte influencia, porque siento que la música de concierto no funciona como cuando hablas de tus bandas favoritas. Es difícil de seguir a un solo compositor, sino a obras aisladas, como el Concierto para piano de Penderecki, o las obras de Eder Vázquez, Enrique Chapela, entre otros”.

El Concurso de Composición Musical Salvador Contreras 2020 es organizado por la Secretaría de Cultura federal, el INBAL y CENIDIM.