LA Paz, Baja California Sur.- Mientras los turoperadores de en la bahía de La Paz son agresivamente vigilados por las autoridades, particulares sin permisos federales, incumplen las normas ambientales, pasean en embarcaciones superando el aforo permitido y tiran basura en las áreas naturales protegidas donde encallan sin que ninguna autoridad les diga nada. 

La amarga queja emana de los empresarios que se dedican a la actividad de avistamiento de tiburón ballena y lobo marino, buceo recreativo, paseos a la Isla Espíritu Santo y fue hecha llegar por fuentes confiables a este diario, por turoperadores cansados de la actitud parcial de las autoridades evidenciaron con imágenes cómo la playa es de quien la puede pagar. 

Desde que Balandra fue cerrada, en marzo por la Comisión Nacional de Áreas Protegidas quien prometió un protocolo para visitar de manera segura el emblemático balneario paceño embarcaciones privadas que cobran por realizar viajes sin tener permisos para ello, operan con aforos que superan las normas sanitarias y de seguridad, a realizar actividades de esparcimiento proscritas en tiempos del coronavirus. 

Las empresas, que usan redes sociales para promover sus actividades clandestinas en Balandra, han sido evidenciadas anclando en sus arrecifes o encallando en sus playas apartadas de los caminos, irrumpen en las rocas donde descansan los lobos marinos, tiran basura y perturban el entorno con motos acuáticas y otras actividades que, normalmente, estarían prohibidas de acuerdo al Plan de Manejo del Área Natural Protegida. 

Así lo denunciaron diversos turoperadores paceños quienes se dicen acosados por la forma en que Capitanía de Puerto, la Comisión de Áreas Naturales Protegidas, y ahora la Comisión Estatal de Riesgos Sanitarios les exigen el cumplimiento al pie de la letra de una serie de normas y reglamentos mientras los turoperadores informales llegan al área natural como si fuera su casa. 

Buscando evitar sumarse a esta operación irregular, los empresarios formalizados del ramo sostuvieron reuniones con las autoridades con quienes convinieron una serie de nuevas medidas enfocadas para evitar la propagación del coronavirus que ha provocado una pandemia que afecta principalmente la actividad turística en todo el estado. 

Los operadores de viajes turísticos dentro de la bahía, presentaron los protocolos en una reunión oficial ante las autoridades e inclusive ha realizado videos promocionales para los visitantes indicando el correcto uso de las medidas para mantener la salud y promover la nueva normalidad en las actividades turísticas. 

“No tienen permisos, no tienen matrícula, no tienen despacho de capitanía, andan como si nada, el interceptor de Marina pasa todo el día de la isla a balandra pero no les dice nada, todo mundo se pasa la bronca”, dijo al ventilar su frustración un turoperador que pidió no revelar su identidad debido al temor de represalias pues “la bahía es muy chica”.