Yani Rosenthal, político y exministro hondureño que cumplió una condena de tres años de cárcel en Estados Unidos por lavado de dinero, podría convertirse en candidato a la presidencia de Honduras.
ESTADOS UNIDOS.
Un político y exministro hondureño que cumplió una condena de tres años de cárcel en Estados Unidos por lavado de dinero del narcotráfico podría convertirse en candidato presidencial del país centroamericano por un partido opositor, dijo el viernes la agrupación política.
El banquero y exdiputado Yani Rosenthal, quien fue ministro de la Presidencia entre 2006 y 2008, llegaría a su país el viernes a la ciudad norteña San Pedro Sula en un vuelo privado procedente de Estados Unidos, dijo una fuente a Reuters, donde es esperado con una caravana por seguidores del Partido Liberal.
Queremos que se convierta en el candidato presidencial del Partido Liberal y luego en el presidente de Honduras", dijo a Reuters el legislador Cristian Saavedra, en representación de una facción de ese grupo político, tercero del país en votos y diputados.
Saavedra detalló que entre 14 y 16 diputados de los 26 de la fuerza política en el congreso pretenden que Rosenthal, de 55 años, alcance la postulación. "Nosotros aspiramos a que nos acepte la candidatura y en su momento el podrá responder", explicó.
Para ello, el político y también abogado deberá participar en unas elecciones primarias previstas para marzo de 2021, de donde saldrán los candidatos de todas las agrupaciones para los comicios generales programados para noviembre de ese año.
Rosenthal fue condenado en una Corte Federal en Nueva York a tres años de cárcel y a pagar una multa de 2.5 millones de dólares por lavado de dinero del narcotráfico a través del Banco Continental, parte de un conglomerado empresarial propiedad de su familia y que se desmoronó después de ese caso.
Un primo suyo, Yankel Rosenthal, exministro de Inversiones entre 2014 y 2015, en el primer período de gobierno del actual presidente, Juan Orlando Hernández, fue igualmente sentenciado en Estados Unidos a dos años y cinco meses de cárcel bajo el mismo cargo. También cumplió su pena y regresó a Honduras.
Hernández y el exmandatario Porfirio Lobo (2010-2014) han sido vinculados por fiscales estadounidenses con cárteles del narcotráfico en juicios en el país norteamericano en los que fueron condenados por tráfico de drogas un hermano del primero y un hijo del segundo.