• Confía en que no crezca el desempleo en julio Destaca la diversidad de proyectos en Oaxaca tras concluir su gira
Ciudad de México. La decisión de que la industria de la
construcción no se detuviera tanto tiempo –su reactivación fue el 1º de junio–
permitió tener mejores resultados para enfrentar la crisis económica generada
por la pandemia y su impacto en el empleo, sostuvo el presidente Andrés Manuel
López Obrador.
El mandatario indicó que de perderse 555 mil
plazas en abril, 340 mil en mayo, 82 mil en junio, en julio sólo van 14 mil,
aunque confió en que no haya más y se mantengan los 19 millones 400 mil puestos
laborales registrados.
Al concluir su gira por Oaxaca en Santa María
Colotepec, con la supervisión de la obras en la carretera que conectará la
capital del estado con la costa, subrayó que su administración optó por
impulsar un desarrollo más horizontal y equilibrado.
Reparto equitativo
Durante 36 años –todo el periodo neoliberal–,
el crecimiento económico se registró en el norte, el Bajío y el centro, a pesar
de que los presupuestos se integraban en gran parte con los recursos obtenidos
de la extracción petrolera en el sureste.
Por eso, ahora con la diversidad de proyectos
en esta parte del país se busca mayor equilibrio regional en el crecimiento
económico al destinar mayor inversión federal, porque también acá en el
sur y en el sureste es donde desgraciadamente hay más pobreza y más abandono;
se vive la paradoja, la contradicción que es una región rica con pueblo pobre,
aseguró el Presidente.
El gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat,
destacó el viraje que ha tenido la Federación hacia esta región, expresado en
los diversos proyectos de infraestructura que favorecerán el desarrollo
económico. Tras recordar que la construcción de esta carretera estuvo
abandonada por más de una década, agregó que su relevancia no sólo impulsará el
turismo en la entidad, sino también ayudará al sector agropecuario de la
región.
El director de Banobras, Jorge Alberto
Mendoza, informó que implicará una inversión de 6 mil 800 millones de pesos con
el compromiso de entregarla al comenzar 2022. Hasta ahora el avance es de 62
por ciento en la construcción de 104 kilómetros de la carretera de dos carriles
por los que transitarán 4 mil vehículos diarios, lo que se sumará al conjunto
de obras para saldar una deuda histórica con Oaxaca.
López Obrador resumió la diversidad de
proyectos en la entidad: la ampliación del puerto de Salina Cruz, inaugurada el
sábado, a la que se integrará la construcción de un nuevo muelle petrolero y
mercante, que ya se licitó, el ferrocarril del Istmo, que conectará los dos
océanos, la integración de 10 parques industriales que contarán con incentivos
fiscales, la rehabilitación de las refinerías Salina Cruz y Minatitlán, así
como la construcción de caminos a todas las cabeceras municipales en la
entidad, entre otros.
Agregó que a diferencia de quienes pensaban
que la epidemia obligaría a detener obras como éstas, dijimos no. No se
detiene ninguna. Tenemos finanzas públicas sanas porque no se permite la
corrupción, hay austeridad, hay un manejo eficiente honrado del presupuesto
público, de modo que Jorge Mendoza, de Banobras, tiene la encomienda de que no
falten recursos hasta que finalice esta obra.
Habló del balance en la aplicación de programas
sociales en el estado, al indicar que se complementan con la entrega de
créditos a las pequeñas empresas y otros dirigidos a la economía informal para
paliar los efectos de la crisis, tomando en consideración a meseros y
camareras; se toma en cuenta a músicos, todos los que han padecido por la
pandemia del Covid, porque necesitamos reactivar nuestra economía, de abajo
hacia arriba.