La Paz, Baja California Sur.- No se sabe cuánto consumen el 70 por ciento de los usuarios de agua potable en Baja California Sur (BCS), dijo la diputada Milena Quiroga Romero, presidenta de la Comisión del Agua en el Congreso del Estado.

Dijo que luego de una gira por los 5 organismos operadores, se hizo un “análisis de valores” a través de un cuestionario, en donde afirmaron que solamente un 30 por ciento de las tomas cuentan con un medidor.

“El otro 70 por ciento tiene cuota fija, no sabemos cuánta agua están consumiendo, no tienen una lectura lo que nos provoca serios problemas”, dijo la diputada.

“Desde su punto de extracción hasta disposición para consumo de la ciudadanía, esto ha creado una situación crítica y fijado una fecha de colapso cada vez más cercana”, expuso.

Explicó que además, solamente se puede cobrar el 60 por ciento de los recibos efectivamente facturados, “por lo menos en el papel hay situación de déficit financiero”, dijo.

Esto provoca, dijo, una “profunda preocupación” entre los reportes de desabasto de agua y deficiente suministro a distintos municipios como Loreto y La Paz.

“Esto estaría agravando, las situaciones de confinamiento en medio de una cuarentena derivada de la COVID-19, deviene en una violación derecho humano al agua”, advirtió Quiroga.

“Hay omisión a su atención en incumplimiento por parte del Estado por la garantía del ejercicio, situación que resulta inadmisible, para quienes velamos por los intereses de nuestros representados”, añadió. 

Resulta urgente, expuso, asumir nuevas políticas públicas que permitan enfrentar la situación de escasez ya que La Paz y Los Cabos son “los primeros municipios de América Latina” que se enfrentarían al “día 0”, en cuanto acceso al vital líquido.

“Esto es que la población de una localidad dejará de tener acceso libre al agua, para solamente obtenerla en esquemas de racionamiento, no llegará agua de domicilio habrá que recolectarla en un sitio particular”, dijo la diputada.

Advirtió que la sobreexplotación de los acuíferos ocurren bajo la presión de desarrollos inmobiliarios, que no toman en cuenta el riesgo de salinización del acuífero, además de las constantes fugas en la red de agua potable y falta de obras de retención.

“O de encauzamiento del agua de lluvia que permitan aprovechar esa parte que llega a nuestra entidad”, expuso.

Esto además de la amenaza latente de la industria “extractivista” que eventualmente podría lograr instalarse en la entidad, poniendo en riesgo las fuentes de agua y su accesibilidad.

“El abasto de agua que se venía dando de manea regular, que se informe a ciudadanía, porque hay una desinformación, manifestaciones, incluso politizando el tema del agua no debe suceder”, dijo la diputada.

“Esperamos los organismos informen a lo propio la ciudadanía, para que cuiden el agua, sí al uso racional del mismo en época de COVID. Todos debemos cumplir con medidas de higiene”, finalizó.