La Paz, Baja California Sur.- Debido a la intensa politización que se vive al interior de la Conferencia Nacional de Gobernadores (CONAGO), algunos gobernantes estatales del país consideran que la salida de su presidente, Carlos Mendoza Davis, debe agilizarse para darle vitalidad. 

Esto fue enunciado por el Gobernador michoacano Silvano Aureoles quien ha declarado que a la CONAGO le ha caracterizado su tortuguismo y apatía, quien tomó Twitter para ventilar estas quejas hacia la Conferencia.

“Una muestra de este incumplimiento es la rotación en tiempo de la presidencia de la CONAGO. Por eso, invito a los gobernadores saliente y entrante, Carlos Mendoza Davis (BCS) y Juan Manuel Carreras (SLP), a que convoquen cuanto antes a la reunión plenaria que se requiere para el relevo”, expresó. 

El gobernador Mendoza Davis apenas asumió la presencia de la CONAGO el 20 de febrero pasado. 

El mandatario michoacano dijo considerar que a la CONAGO le caracterizan “la pasividad y la indiferencia” por lo que considera necesario rescatar la esencia de la conferencia. 

Las asociaciones de gobernadores han sido cruciales para llevar una coordinación política entre las medidas sanitarias establecidas por la federación y las necesidades de los estados para hacer frente a la pandemia de COVID-19. 

Mientras la CONAGO se ha visto inmersa en una crisis producto de su manejo político, los gobernadores han comenzado a operar a partir de otras formas de alianza federalista por regiones. 

Por ejemplo los estados del bajío (San Luis Potosí, Guanajuato, Querétaro, Jalisco y Aguascalientes) han acordado medidas conjuntas para sortear sus necesidades de diálogo con la federación. 

Así mismo existe una Alianza Federalista entre los estados de Chihuahua, Coahuila, Tamaulipas, Durango, Michoacán, Colima y Nuevo León. 

El viernes, un día después que la CONAGO sostuvo una tibia reunión con el embajador de los Estados Unidos, los doce estados de los bloques mencionados arriba se reunieron (sin invitar al presidente de la CONAGO) para discutir la agenda política y la atención federalizada ante la crisis sanitaria y emitieron un comunicado criticaron la falta de preocupación por el hecho de que el sistema federal no haya podido articular una respuesta sensata ante la pandemia. 

En el documento, que titularon “hacia un nuevo federalismo” los gobernadores hicieron hincapié en colaborar con la Federación para renovar el federalismo para hacerlo cooperativo y responsable, detonar el desarrollo sustentable con un enfoque regional mexicano y pidieron un nuevo Pacto Fiscal, más justo y equitativo con los estados parte.