De acuerdo con especialistas, la Profepa no aceptó ni asistencia ni consejo de los grupos de rescate para darle un buen seguimiento al mamífero y este murió
La Paz, Baja California Sur.- Luego de que trascendió en redes sociales que una cría de lobo marino fue identificada por bañistas y rescatada por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), fue reportado como muerto por las autoridades.
Como informó Diario El Independiente, el cachorro de lobo marino, fue identificado en las inmediaciones de un popular restaurante de la playa El Médano.
De acuerdo con la información vertida por las autoridades el espécimen luego de ser valorado por distintas agencias y voluntarios dedicados al cuidado de los mamíferos marinos en la localidad, el cachorro quedó en posesión del personal de procuraduría ambiental.
De acuerdo con la versión del Comité de Vigilancia Ambiental Participativa (CVAP) de Cabo San Lucas que asistió a durante el fallido rescate indicó debido a que profepa debía atender otros asuntos, el mamífero fue separado de la playa y luego a solicitud de un reporte de los grupos de rescate, se dejó saber que el espécimen había muerto.
“El cachorro de entre 2 y 4 semanas de nacido, fue encontrado el 1 de julio presentaba buenas condiciones físicas y estaba tranquilo en la playa descansando”, relató Lugía Hernández Rodríguez, quien forma parte del CVAP.
Tanto dicho comité como los especialistas en rescate de animales marinos del Centro de Rescate de La Paz evaluaron la situación y ofrecieron el apoyo logístico para cuidar del cachorro.
Profepa, quien se presentó alrededor de las 10am del 2 de julio, luego de que los voluntarios cuidaron de él toda la noche, decidió que haría un patrullaje en el área para buscar a la madre y se llevó consigo al cachorro hasta la lobera en las inmediaciones del emblemático arco de Los Cabos.
Aún con el apoyo logístico de los operadores turísticos locales, no encontraron condiciones favorables por el fuerte oleaje y las corrientes provocadas por una tormenta cercana además de que no se encontraron otros lobos marinos en el área.
De acuerdo con ésta versión, después de tres horas, los inspectores de PROFEPA recibieron autorización de sus superiores para brindar apoyo veterinario y administrar la atención al cachorro. La cual consistía en hidratarlo con agua marina y alimentarlo. Se solicitó entonces el apoyo de un veterinario especialista que se trasladaría de San José del Cabo, lo que toma alrededor de una hora.
No obstante, en ese momento, el personal de Profepa dijo a los voluntarios presentes que recibió un llamado para atender una situación en el fraccionamiento El Dorado en San José del Cabo y decidieron retirarse del lugar con el espécimen sin que hubiera recibido la atención esperada.
El CVAP ofreció apoyo para monitorear y resguardar al cachorro mientras Profepa atendía el llamado en el fraccionamiento El Dorado, para no mantener encerrado y bajo más estrés al cachorro (en una caja transportadora en un clima que de más 30°C dentro de un automóvil) por más tiempo del necesario, sin embargo, Profepa no aceptó el apoyo y tampoco autorizó que el equipo rescate se llevara al animal para poder brindarle los cuidados necesarios para su sobrevivencia.
Los especialistas veterinarios esperaron el resto de la tarde y Profepa nunca llegó con el cachorro, además de que, por el resto del día las autoridades no contestaron llamadas telefónicas para dar seguimiento a esta situación.
Todos los que acompañaron el caso, la comunidad local, empresarios, voluntarios y turistas se preguntaban cómo había terminado la historia ya que nadie contaba con información sobre el paradero del cachorro y su situación actualizada.
El 2 de Julio al final del día, el Comité de Vigilancia confirmó que PROFEPA informó que el animal murió, sin dar detalles ni pormenores del caso.
El lobo marino es un mamífero protegido por las leyes mexicanas NOM-059-SEMARNAT-2010, que tiene por objeto identificar las especies o poblaciones de flora y fauna silvestres en riesgo en la República Mexicana.
Diario El Independiente intento, sin éxito, contactar a la delegación local de Profepa para contar con una relación de lo sucedido.