Ciudad de México. Con el avión presidencial de fondo, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que el lujoso Boeing 787-8 es una representación de “cómo se mal gobernaba en el país durante todo el periodo neoliberal. Es un ejemplo de los excesos que se cometieron. Es ostentación”, afirmó.

El mandatario ofreció hoy su conferencia diaria en el antiguo Hangar Presidencial y reiteró que no se subirá a la aeronave para recorrerlo, como harían los medios de comunicación.

Cuestionó “el nivel de irracionalidad” que se tuvo para denominarlo “José María Morelos y Pavón”, que encarnaba la lucha por la igualdad, cuando pudo llevar el nombre de “Antonio López de Santa Anna, de Porfirio Díaz, de Carlos Salinas de Gortari porque tendría más apego a la realidad”.

Lo definió: "Es monumental, faraónico y, desde luego, este lujo es un insulto al pueblo de México habiendo tanta necesidad, pobreza”, y ahora con la crisis generada por la pandemia del Covid-19.

En el ex Hangar Presidencial, cuya remodelación por mil millones de pesos también cuestionó, López Obrador señaló que la aeronave adquirida durante el gobierno de Felipe Calderón y usado durante la administración de Enrique Peña Nieto “es un ejemplo de los excesos que se cometieron.

 “Se iban a terminar de pagar por el avión cerca de 7 mil millones de pesos, porque fue financiamiento. Nada más costo de mantenimiento de viajes al año significa alrededor de 150 millones de pesos”.

Mencionó que comparado con el costo de remodelación del ex Hangar Presidencial, la ampliación del actual aeropuerto que inauguró el viernes fue de 500 millones de pesos.

En el periodo neoliberal, insistió, “se le daba la espalda al pueblo, sobre todo a la gente pobre, y los altos funcionarios vivían colmados de privilegios, de atenciones. Era un gobierno de ricos para ricos con un pueblo de pobres. Ese fue el distintivo de los gobiernos neoliberales”, resaltó.

El presidente sostuvo que todo esto se tiene que subrayar porque “hay quienes quieren regresar a esa forma de gobierno; aspiran a que continúe la corrupción, los privilegios. Esa es una característica de la oposición conservadora y hemos hecho el compromiso de transformar a México. Se va a desterrar la corrupción, la peste más funesta del país, y ya se está avanzando en ese propósitos”.

Reiteró que se acaban los lujos y el presupuesto se destina para garantizar el bienestar del pueblo.

Recordó que con el “negocio” que gobiernos anteriores tenían proyectado con la construcción del nuevo aeropuerto de Texcoco -ya cancelada- “se iba a cerrar el actual aeropuerto y desde luego se tenía que desmontar el hangar. Se pretendía hacer un gran negocio inmobiliario, estilo Santa Fe. También se iba a cerrar el aeropuerto de la Base Aérea de Santa Lucía”.

Insistió que el neoliberal “era otro mundo, ahora es gobierno del pueblo, para el pueblo y con el pueblo, y sé muy bien lo que esto no les gusta a mis adversarios. Les ofrezco disculpas por las molestias que les puedan causar mis palabras , pero ya es momento de decir basta y acabar con la corrupción e impulsar un cambio verdadero. Que haya igualdad, que seamos verdaderamente solidarios sin odios, son rencores, un Mexico amoroso, con felicidad”.