· De acuerdo al semáforo los templos e iglesias aún están cerrados, pero parece que para los políticos y sus allegados estas medidas no aplican, como en el caso de Castro Guzmán
San José del Cabo, Baja California Sur-.De acuerdo al Sistema Sanitario del Gobierno del Estado las iglesias y templos religiosos se podrán abrir hasta que el semáforo se encuentre en el nivel 4 naranja que significa que aun el peligro de contagios es muy alto.
Sin embargo, esto parece que no aplica a la clase política y sus allegados, como lo demostró la alcaldesa de Los Cabos, Jesús Armida Castro Guzmán el pasado fin de semana.
En sus redes sociales la alcaldesa compartió que fue madrina de bautizo junto con su esposo, agregando a la publicación que fue un honor que la hayan elegido para tan importante celebración de la religión católica.
Lamentablemente esta acción refleja una falta de sensibilidad ante la pandemia de COVID-19, ya que muchas personas tuvieron que posponer sus eventos sociales debido al cierre de los templos, las iglesias, los salones de fiestas y demás.
En sus redes sociales oficiales la alcaldesa insiste en la importancia de quedarse en casa, no saturar los espacios públicos y acatar las medidas y disposiciones sanitarias que ha dictado la Secretaría de Salud (SSA) del gobierno del estado, pero en lo privado hace lo contrario, generando una ola de críticas.
Cabe mencionar que, en semanas anteriores, el gobernador Carlos Mendoza Davis fue criticado también por no apegarse a las medidas sanitarias y acudir al evento de graduación de su hijo, cuando miles de niños sudcalifornianos se quedaron sin una celebración.
Por lo que parece que el mensaje siempre será el mismo: los políticos pueden hacer lo que mejor les convenga a intereses personales y la ciudadanía tiene que acatar todas y cada una de las medias, aunque necesarias, pero que no dejan de ser limitantes en sus actividades cotidianas.