Cabo San Lucas (CSL), Baja California Sur.- La relajación de la cuarentena en Baja California Sur, trajo un claro incremento en casos positivos de COVID 19, situación informada en reiteradas ocasiones a través de Diario El Independiente, y recientemente confirmada por el propio gobernador del estado, Carlos Mendoza Davis. La “nueva normalidad” regresó el índice de accidentes vehiculares en el municipio de Los Cabos. 

Con la Fase Cinco del Semáforo de Salud que considera “crítica” la Pandemia de COVID 19, se autorizó aperturas de negocios y economías, pero también propició la venta de alcohol, en establecimientos, puntos de venta y supermercados. El consumo de bebidas embriagantes se ha convertido en un factor de riesgo, para la movilidad, al ser razón de accidentes en la zona urbana y Carretera Transpeninsular. 

A la par de una mayor movilidad en el municipio de Los Cabos, autorizada por el Consejo Estatal de Seguridad en Salud, también se presenta un mayor número de accidentes vehiculares con saldo de personas lesionadas y miles de pesos en daños. En las últimas 24 horas, se han registrado dos percances en el Corredor Turístico de Los Cabos y en ambos, se encontraron botellas y latas vacías de cerveza y otros alcoholes. 

“Alcohol sí, ejercicio no”. 

Así lo ve la ciudadanía que hoy, no puede hacer uso de gimnasios y espacios deportivos en Los Cabos. El Comité Estatal de Seguridad en Salud de Baja California Sur no ha permitido aún la ejercitación en centros de vida saludable y gimnasios. Esto ha sido tomado como un “alcohol sí, ejercicio no”, por parte de la comunidad cabeña. Y esto, sin pensar la afectación económica a los gimnasios, pues las Unidades Deportivas, trotapistas, canchas de fútbol, básquetbol, que son municipales, siguen cerradas.

En contraparte, la competencia entre negocios como tiendas de conveniencia, abarrotes, supermercados por ofrecer la cerveza más barata, opera con normalidad.