• Lo pedí para no poner en riesgo a la población, porque si no se suspendía iban a perder la vida más de 200 inocentes, señaló
Cuernavaca, Mor. El presidente
Andrés Manuel López Obrador afirmó que fue él quien ordenó liberar a Ovidio
Guzmán, hijo de Joaquín El Chapo Guzmán, durante el operativo militar del
17 de octubre del año pasado, en Culiacán, Sinaloa.
“Yo ordené que se
detuviera ese operativo y se dejara en libertad a ese presunto delincuente para
no poner en riesgo a la población, porque iban a perder la vida, si no
suspendíamos el operativo, más de 200 inocentes”. Señaló que fue hasta dos días
después de que el mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, le ofreció
apoyo.
Al resaltar que “aunque
parezca increíble”, Trump, con quien, dijo, tiene buena
colaboración, ha dado ejemplo de respeto en asuntos delicados.
Aseveró que también le
ofreció apoyo cuando en Bavispe, Sonora, “asesinaron a niños y mujeres de la
Familia Lebarón y otras familias. El ofrecimiento (del presidente Trump) fue en
el sentido de que nos mandaban agentes para ayudar a investigar los casos y castigar
los responsables.
“De manera muy
respetuosa le agradecimos su ofrecimiento y él entendió que nos correspondía a
nosotros atender estos casos, como siempre. No vamos a permitir que ningún
gobierno extranjero se inmiscuya en asuntos que sólo corresponden a las
autoridades mexicanas. Eso es respetar, hacer valer nuestra soberanía.
“Esto no significa que
no haya cooperación, existe, pero nosotros decidimos si esa cooperación puede
ayudar siempre y cuando se respete nuestra soberanía”.
Señaló que el gobierno
de Estados Unidos está obligado a responder la nota diplomática sobre el
operativo Rápido y Furioso. “Nosotros consideramos una violación a
nuestra soberanía que se haya permitido la introducción de armas, teniendo
conocimiento el gobierno de México, aunque se ha negado este asunto.
“Hay evidencias, hay
información que se está desclasificando en Estados Unidos, en donde se menciona
que ese operativo se hizo de manera conjunta entre el gobierno de ese país y el
gobierno de México”.
Insistió que su administración
“está defendiendo nuestro derecho soberano a decidir sobre la política de
seguridad que se aplica en México, cosa que no sucedía anteriormente. Había
mucha injerencia de elementos de agencias del extranjero en los asuntos
internos de México”.
Recordó que en Morelos
“ajusticiaron a un jefe de una banda criminal famoso en un operativo
y se supo que había intervenido una organización de Estados Unidos, cuando se
llevó a cabo”.
Y no sólo eso, agregó,
el embajador estadunidense en aquel entonces “declaró que el gobierno de
Estados Unidos confiaba más en la Marina que en el Ejército. Se metió a opinar
sobre un asunto que solo compete a nosotros, los mexicanos. Había un injerencia
total. Eso ya no”.
Previamente, informó que
fue notificado por Santiago Nieto, titular de la Unidad de Inteligencia
Financiera (UIF), que no encontró elementos que acreditaran que funcionarios
del gobierno de Cuauhtémoc Blanco hubieran incurrido en manejo de recursos con
procedencia ilícita, para llevar el caso a la Fiscalía General de la
República.
Tenemos que actuar
siempre con apego a la verdad, “porque no es acusar por acusar con propósitos
políticos o partidistas. Donde se encuentra que hay elementos, se procede”,
afirmó.
Dijo que ante la FGR hay
otras denuncias, “pero no de parte nuestra, no lo que tiene que ver con el
Ejecutivo Federal”.