• Contradicciones entre López-Gatell y López Obrador provocan confusión ciudadana respecto a la pandemia • El gobierno federal traslada a los estados y municipios el desgaste por “obligar” a ciudadanos a quedarse en casa • Estamos ante la disyuntiva de decidir a cuál de los dos López hacerle caso
Las actitudes ambiguas y en ocasiones
hasta contradictorias entre las autoridades de la Secretaría de Salud federal y
del propio Presidente Andrés Manuel López Obrador mantienen en la confusión a
mucha gente que supone aún a pesar de todo, que la pandemia por Coronavirus, no
es tan grave, incluso algunos afirman que no existe como tal, lo que genera
dificultades severas para convencer a la ciudadanía de quedarse en casa.
Parece absurdo comentar este
tema desde este ángulo, pero lo cierto es que a pesar de los llamados de las autoridades
locales muchos ciudadanos aún se resisten a quedarse en casa y evitar con ello
mayores contagios del Covid-19.
Tan es así esta situación que
cuerpos policiales de los municipios y de la entidad, se han insistido en la
necesidad de literalmente de “arriar” a muchas personas que insisten en salir
de sus viviendas a realizar actividades que no son prioritarias.
La confusión surge precisamente
desde la Subsecretaría de Salud que encabeza Hugo López-Gatell, que ha emitido
mensajes muy contradictorios.
Ayer por ejemplo, el
funcionario federal corrigió y dijo que la parte más alta del contagio finalmente
no será este seis de mayo, como insistió en varias ocasiones la semana pasada,
sino hasta pasado mañana viernes ocho de mayo.
Por su parte el mandatario López
Obrador ya tiene varias semanas en las que no deja de afirmar que ya estamos
superando esta crisis sanitaria y que incluso no es necesario hacer uso del
cubre bocas (él mismo no utiliza ese material sanitario) lo que genera por supuesto
confusión.
Algunos siguen las
indicaciones de la subsecretaría de salud y otros prefieren hacer caso al jefe
del ejecutivo federal.
El problema es que a nivel
local la resistencia y de desgaste ante la población la tendrán que experimentar
las policías municipales y estatales, incluso hasta de la Guardia Nacional, el
Ejército y la Marina.
Afortunadamente en Baja
California Sur, la mayor cantidad de ciudadanos ha atendido el llamado de quedarse
en casa, aunque aún existen indolentes que subestiman la medida.
Hasta el cierre de este
espacio, ya se habían registrado en la media península 20 decesos por esta pandemia
que tendrá como consecuencia además de la muerte de muchos ciudadanos, una
crisis económica sin precedentes y de la que tampoco está claro qué pretende
hacer el gobierno federal para enfrentarla.
Vamos a ver a quién le echa la
culpa el Presidente López Obrador, (como suele ser su costumbre) ante las
evidentes pifias y desatinos de un mandatario que le urge volver a la
normalidad laboral de la sociedad pero que de hacerlo ahora sería tanto como mandar
al matadero a miles de ciudadanos.
Esta semana se supone que la
curva epidemiológica empezará a bajar aunque al mismo tiempo se informa que estamos
en la parte más álgida de los contagios.
Por lo pronto vale más atender
la instrucción básica de quedarse en casa y que quienes aún suponen que esta
medida es una exageración, adquieran sentido común y que entre las mentiras y
contradicciones que se disputan López-Gatell y López Obrador, no haya mayores
afectaciones en la salud y economía de los mexicanos.
Estamos ante un reto
verdaderamente patético: La disyuntiva de decidir a cuál de los dos López
hacerle caso.
¿No le parece así amable
lector?