• Es un descubrimiento importante por la cantidad de restos, aseveró Pedro Francisco Sánchez.
Tecámac, Méx. Los restos fósiles de más de 60 mamuts,
entre cinco y seis ejemplares de camélidos, bisontes y caballos, así como
algunas aves y peces, de alrededor de 25 y 26 mil años de antigüedad fueron
hallados durante los trabajos de construcción del nuevo Aeropuerto
Internacional General Felipe Ángeles, en la base aérea de Santa Lucía, informó
a La
Jornada el coordinador nacional de arqueología del Instituto
Nacional de Antropología e Historia (INAH), Pedro Francisco Sánchez Nava.
Se trata de un
hallazgo singular para México y América por la gran cantidad de
ejemplares, añadió.
El descubrimiento también incluye 15
enterramientos humanos de un periodo más reciente, probablemente de una aldea
del posclásico que estaba en las orillas del lago de Xaltocan. Eran seguramente
pescadores o agricultores que pudieron en algún momento interactuar con la
fauna de la época.
Los hallazgos interfieren con la construcción
del aeropuerto, afirmó el funcionario, porque obligará a los constructores a
modificar algunos proyectos y espacios que tienen, “pero la obra es tan grande
que se irán a otro frente de trabajo mientras nosotros, con todo el rigor
científico, recuperamos los vestigios.
Vamos a permanecer en la obra hasta que se dé
la última palada, porque aunque ya no estemos excavando en algún espacio,
tenemos que supervisar cualquier remoción de los estratos que se hagan en el
aeropuerto, explicó.
El proyecto de salvamento arqueológico del
INAH en la zona de construcción del nuevo aeropuerto comenzó en abril de 2019,
cuando se efectuó el reconocimiento de toda el área. Vázquez Nava detalló que
“en octubre comenzaron los hallazgos, es algo que se esperaba; sabíamos que
esto iba a ocurrir porque tenemos antecedentes de fauna pleistocénica y más en
el lago de Xaltocan, en la orilla, en la parte poniente. Era previsible, pero
lo que no se podía prever era la gran cantidad de osamentas.
Sobre todo privilegiamos aquellas zonas donde
la obra iba a remover estratos y a hacer excavaciones. Es imposible excavar
todo el terreno, pero finalmente hay superficies, por ejemplo, donde se ve que
hay pequeñas elevaciones o restos de cerámica, y se fueron marcando estos
puntos como susceptibles de excavación; posteriormente se hace un
acompañamiento de la obra.
Los restos de los animales, entre ellos más
de 60 mamuts, fueron localizados en tres puntos: uno en la denominada playa y
dos en las zonas más profundas del terreno. Algunas osamentas están más
íntegras, otras parcialmente conservadas y asociadas a fauna pleistocénica. Hay
además camélidos, caballos, aves y bisontes.
Es todo un espacio que compartieron estas
especies. Son más de 60 mamuts y seguramente van a ser más; el conteo se está
haciendo a partir de un rompecabezas que se está uniendo. Es un hallazgo
importante por el número de individuos y será una muestra muy representativa
para estudiar estos animales. Tenemos indicios, pero no hay la certidumbre de
que grupos humanos de esa época aprovecharon a estos grandes animales de alguna
manera. Eso estudiaremos en los trabajos de gabinete, refirió.
Los ejemplares de mamuts pertenecen a la
especie Mammuthus
columbi –abundante en América del Norte durante el
Pleistoceno, era geológica concluida hace 12 mil años– e incluyen machos,
hembras y crías, “los cuales, probablemente, murieron al quedar atascados en el
lago, debido a que su profundidad variaba e incluso llegaba a desecarse hasta
quedar convertido en un espacio pantanoso.
“A diferencia del contexto inédito de caza de
mamuts descubierto por el instituto en el también municipio mexiquense de
Tultepec, en noviembre de 2019, la megafauna de Xaltocan –localizada a
profundidades que median entre 80 centímetros y 2.5 metros– no presenta huellas
de cacería humana o acomodos antropogénicos. Sin embargo, no se descarta que
los humanos hayan aprovechado estos pesados animales una vez que quedaban
atascados en el fango”, puntualizó.
Sánchez Nava manifestó que el proyecto de
salvamento está a cargo de Rubén Manzanilla López, junto con 30 arqueólogos y
200 trabajadores que ayudan en las labores de excavación y liberación de estos
espacios, además de tres restauradores.
Lo que hicimos fue parar la obra y hacer el
salvamento. Además, todavía hay áreas que tenemos que excavar y el potencial es
muy alto para seguir encontrando esta fauna pleistocénica, insistió.
Acerca de los 15 entierros humanos del periodo
prehispánico también descubiertos, los arqueólogos han determinado que fueron
inhumados domésticamente, ya que algunos estaban acompañados de ollas, cajetes
y figurillas de barro, como la de un perro.
La historia del lago de Xaltocan y de la
región de Santa Lucía es fascinante, comentó Sánchez Nava. Agregó que se ha
considerado la propuesta de habilitar el casco de la antigua hacienda de Santa
Lucía como museo de sitio integrado al nuevo aeropuerto internacional.
El INAH ha abierto 23 frentes de exploración
en los terrenos de la magna obra, como parte de un proyecto de salvamento
arqueológico y paleontológico, el cual se lleva a cabo con el respaldo
logístico y financiero de la Secretaría de la Defensa Nacional, y se desarrolla
en apego a la legislación en la materia.