La Paz, Baja California Sur.- El gobernador del estado, Carlos Mendoza Davis, aseguró que se cuentan ya con 147 respiradores para el servicio de la ciudadanía que lo requiera, en esta emergencia por el coronavirus. 

En entrevista radiofónica, sostuvo que este número se incrementará en 95 más para llegar a un total de 242, entre las tres instituciones, Secretaría de Salud, Instituto Mexicano del Seguro Social y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE). 

“Sí estamos preparados”, expresó el mandatario al tiempo que agregó que entre las acciones que han desarrollado para hacerle frente a la emergencia de COVID-19, se encuentra la reconversión hospitalaria, con la disposición de 350 camas para pacientes contagiados. 

Dijo que la cantidad de ventiladores en BCS, con relación a su población, “pone en circunstancia favorable” comparado al resto de las entidades del país. 

Añadió que se está buscando comprar más, pero el mercado es complicado en estos momentos donde “todos quieren ahora sí adquirir estos instrumentos”. 

Mendoza Davis refirió que pese al equipamiento médico con que se cuenta y del que se dispondrá que esté por llegar, es importante que la ciudadanía acate las medidas preventivas. 

“Si no atendemos las medidas de precaución cuando salimos, si no hacemos caso del distanciamiento social, por supuesto que esta capacidad que se ve será insuficiente, puede verse rebasada y generar crisis”, afirmó. 

Puntualizó que pese a las diferencias con la Federación al enviar material que consideró el Estado que no era apto para utilizarse y se tuvo que regresar, continúan trabajando conjuntamente en las reuniones del Comité de Seguridad en Salud, a fin lograr salir adelante de esta emergencia, con el menor daño posible a la población. 

Cabe mencionar que en días pasados, personal del Hospital de la Secretaría de Salud en Santa Rosalía refirió que tenían al menos un año solicitando al Gobierno del estado el envío de insumos, incluso recuso humano, a fin de hacerle frente a las necesidades cotidianas en la institución, en aquella localidad. 


La crisis se agudizó en estas semanas ante la falta de apoyo, de tal forma que tuvieron que protestar. Refirieron que la SSA BCS no atendió con oportunidad sus requerimientos ni de insumos ni de material, menos desde el inicio de año cuando se conoció del surgimiento del virus y su propagación.