• Con la pandemia EU se cierra más. ‘Cárteles’ buscarían vender más aquí
Ciudad de México. El gabinete de seguridad nacional ha
advertido sobre la necesidad de profundizar los programas de prevención y
combate a las adicciones, ya que se considera que al igual que ocurrió tras los
ataques a las Torres Gemelas de Nueva York en septiembre de 2001, el cierre de
fronteras y las medidas que ha impuesto el gobierno de Estados Unidos por la
pandemia provocarán que los cárteles mexicanos amplíen la oferta de drogas en
el país.
En ese contexto, las advertencias del
gabinete de seguridad se sustentan en los resultados de las encuestas
nacionales de adicciones, las cuales refieren que se ha presentado
una tendencia de aumento al pasar de 4.6 por ciento en 2002 a 9.9 por
ciento en 2016 el consumo de drogas ilegales.
Los funcionarios entrevistados, tanto de
órganos civiles como de fuerzas armadas, señalaron que tras los ataques
terroristas en Estados Unidos, ese país aplicó mecanismos de seguridad en su
frontera sur, que generaron pérdidas para las organizaciones delictivas
mexicanas al no poder cruzar la misma cantidad de droga (mariguana, heroína y
cocaína). En consecuencia, disminuyeron el costo y calidad de las sustancias y
crearon mercados con grupos de narcomenudeo que luego derivaron en constantes
enfrentamientos entre clanes delictivos por el control de las rutas y los
sitios de distribución.
Las autoridades mexicanas consideran que, por
la pandemia, estas bandas criminales han disminuido el número de embarques y
las cantidades de droga (cocaína, mariguana y drogas sintéticas) que envían a
Estados Unidos, principalmente los relacionados con los cárteles de
Sinalo y Jalisco Nueva Generación, así como células de los Arellano
Félix, la organización Carrillo Fuentes, el cártel del Golfo
y Los
zetas.
Estrategia
El viernes, la Secretaría de Salud dio a
conocer sus estrategias en materia de salud mental, que incluyen atención
sicológica, sicosocial y de apoyo para prevenir y combatir la adicción a las
drogas.
En cuanto a este último rubro, Gady Zabicky,
titular de la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic), alertó sobre
el riesgo de contagio que corren los consumidores de enervantes, pero señaló
que ésta es una oportunidad para que quienes tienen adicciones reciban atención
especializada y abandonen esta práctica.
La Encuesta Nacional de Consumo de Drogas,
Alcohol y Tabaco (Encodat) 2016-2017 refiere que mientras en 2002, 2.1 por
ciento de las mujeres en el país habían consumido alguna vez en la vida alguna
droga, para 2008 la cifra aumentó a 2.6; en 2011 creció a 3 por ciento, y en
2016 llegó a 4.8 por ciento.
En cuanto a los hombres, la encuesta refiere
que en 2002, 8.6 por ciento de la población masculina había consumido droga
alguna vez; para 2008 la tendencia pasó a 9.1; en 2011 el crecimiento fue mayor
al llegar a 13 por ciento, y en 2016 se ubicó en 16.2 por ciento del total.
En términos generales, la misma estadística
señala que 5 por ciento de la población dijo haber consumido alguna vez droga;
en 2008 el porcentaje aumentó a 5.7; para 2011 aumentó nuevamente hasta
alcanzar 7.8, y en 2016 se estimó en 10.3 de la población nacional.
Por lo que hace a drogas ilegales, la Encodat
señala que en 2002 solamente 0.1 por ciento de la población femenina declaró
haber consumido alguna sustancia ilegal en su vida, pero la tendencia creció,
ya que en 2008 alcanzó a 1.9 por ciento; para 2011 el porcentaje disminuyó a
0.4 por ciento, pero en 2016 creció hasta 1.1 por ciento.
En el caso de los varones, en 2002 el
porcentaje de quienes aceptaron haber consumido alguna vez drogas ilegales era
de 1.7; para 2003 creció este consumo hasta 2.3 de la población; en 2011 se
consideró que esta incidencia se presentaba en 2.6 por ciento de los hombres, y
para 2016 la tendencia creció a 4.4.