• La mayoría legislativa será determinante en la disputa por la legalidad en el Congreso del Estado • Se establece el pleno y sustituye a la presidenta del periodo de sesiones Daniela Rubio por Mercedes Maciel • Debe imperar la ley en el trabajo legislativo por el bien de BCS
Definitivamente la posibilidad
de que el Coronavirus se registre en la entidad paralizó prácticamente todas
las actividades que congreguen a grupos de más de 50 personas en la entidad,
medidas que fueron acompañadas por toda una estrategia del gobierno del estado
que incluyó la cancelación de eventos como el Tour de France programado para
este fin de semana, así como las tradicionales fiestas patronales de San José
del Cabo.
Obviamente las medidas no son
exageradas por ello también se dispuso aplicar mediciones de temperatura a
viajeros que arriban a la entidad por las diferentes vías principalmente en
aeropuertos y en la terminal portuaria de Pichilingue para las personas que
llegan esta capital vía transbordador.
Hasta ahora el efecto de lo
que puede representar en pérdidas económicas esta situación es difícil de
determinar ya que también a estas actividades se sumó el paro de labores
educativas a partir de este vieres y hasta el 20 de abril.
Obviamente se espera que
hoteles y restaurantes de la entidad se vean afectadas con una baja en sus
vetas mismas tradicionalmente se incrementan gracias al periodo vacacional de
Semana Santa programado para dentro de dos semanas.
Con la misma razón la diputada
Daniela Rubio, intentó sin éxito cancelar la sesión pública ordinaria del
Congreso del Estado, pero su instrucción no fue acatada por el grupo de doce
diputados que conforman las fracciones parlamentarias de Morena y de Juntos
Haremos Historia, mismos que restablecieron los trabajos legislativos para
ratificar las decisiones tomadas en la sesión privada del pasado seis de marzo.
Los diputados no solo
iniciaron la actividad legislativa y ratificaron la serie de cambios en las
presidencias de comisiones y de alguno empleados como el propio Oficial Mayor,
sino que incluso acordaron nombrar como nueva presidenta del periodo ordinario
de sesiones a la diputada Mercedes Maciel en sustitución de Daniela Rubio,
quien ya para entonces había abandonado el recinto legislativo en compañía del
resto de sus simpatizantes legisladores.
Los legisladores que
reiniciaron sus actividades por encima de la disposición de Daniela Rubio,
afirmaron que las condiciones respecto al Covi 19 a quien consideraron sin
facultades para tomar dicha decisión y consideraron demás que las actividades
legislativas podrían realizarse sin mayores problemas y sin riesgos sanitarios.
Ahora habrá que ver con
certeza quien tiene de su parte la legalidad ya que ambos grupos afirman
cumplir con la ley que su contraparte es la que violenta las disposiciones
legales, por lo que para empezar hay dos instrucciones giradas a los
trabajadores de este poder legislativos.
Una afirma que estoan
autorizados a no presentarse a laborar ya desde ayer y la otra afirma
exactamente que el descanso es a partir de próximo lunes 20 de marzo.
Así que habrá que estar muy al
pendiente si surge alguna autoridad que por encima del poder legislativo pueda
determinar el rumbo legislativo o hasta dónde la mayoría parlamentaria puede
hacerse valer a la hora de tomar decisiones.
Hasta ayer en el Congreso se
observaron dos grandes grupos en plena confrontación.
Por una parte, están el
diputado y la diputada del PAN, sumado a una legisladora del PRI, el PRD, el
partido Humanista y tres diputados del PES, que suma en total ocho diputados y
el grupo conformado por Morena y la fracción Juntos Haremos Historia, que ayer
sumaron doce legisladores mismos que por unanimidad ayer ratificaron todos sus
movimientos incluyendo la presidencia del periodo ordinario de sesiones y la
junta de coordinación política del Congreso.
Veremos que sucede este jueves
día en que fue convocada la siguiente sesión ordinaria del actual periodo y
hasta dónde la legalidad impera en este recinto que paradójicamente tiene como
principal labor precisamente la de establecer leyes para el mejor
funcionamiento de la entidad y buscar mejores condiciones de convivencia social
para los sudcalifornianos.
Está claro que nadie perder de
vista que por encima de todo está la legalidad y que es ahí justamente donde se
tendrán que enfocar quienes puedan determinar el destino del Congreso del
Estado y cuya labor reside principalmente en los propios legisladores.
Esperemos que para entonces
las afectaciones del Covi19 hayan sido las mínimas y que podamos encontrar la
normalidad de la vida social sudcaliforniana sin caso alguno de afectaciones
por este mal que mantiene alerta literalmente a todo el mundo.
Ya veremos.