• La apuesta de Melina Balcázar y Pedro Alejandrez es ofrecer a los lectores un contrapunto con la literatura anglosajona
CIUDAD DE MÉXICO.
Cuando era fotógrafo, las memorias del francés Félix Tournachon,
mejor conocido como Nadar (1820-1910), “un imprescindible testimonio de los
primeros años de la fotografía”, es el primer título que la editorial Canta
Mares lanza este año.
Especializada
en la literatura y el pensamiento franceses contemporáneos, esta empresa
fundada hace cinco años por Melina Balcázar y Pedro Alejandrez, ambos editores
y traductores de los textos, ha decidido reforzar su distribución en el país,
lo que ha constituido el principal reto, comentan en entrevista.
En
las 14 viñetas que reúne en su libro, “verdaderas fotografías en prosa”, Nadar
cuenta sus experimentaciones con el servicio postal aéreo durante el Sitio de
París, el terror de Balzac por ser fotografiado, el impacto masivo de la imagen
en un célebre caso de homicidio, su descenso a las catacumbas y cloacas de
París y su ascenso en globo aerostático, explican los editores.
“Nos interesan los autores reconocidos, que
ya tienen lectores, pero que seamos los primeros en traducirlos al español de
México”, agrega Balcázar. “Buscamos entablar un diálogo entre México y Francia.
Aunque nuestro fondo sea francés, pensamos siempre en el país, no olvidamos de
dónde venimos. Aunque viva fuera, mi punto de partida es México”, aclara.
Con
el de Nadar, el sello posee ya siete títulos en su catálogo. Los otros seis
son El
niño con rostro color de la muerte, de Pascal Quignard, El caballo, de
Claude Simon, Gestos de aire y de piedra. Sobre la materia de las imágenes,
de Georges Didi-Huberman, Bajo escucha. Estética del espionaje, de Peter
Szendy, El
entretiempo. Conversaciones con la historia, de Patrick
Boucheron y Al
morir Jonathan, de Tony Duvert.
“Nos interesamos en la cultura y la lengua
francesas porque son un contrapunto de la cultura anglosajona que se ha vuelto
global. Hay una conciencia, una voluntad en Francia no de combatirla, sino de
criticarla, decir que no es el único modo de entender el mundo. Son otras
maneras de hacer historia, estética, filosofía y literatura, que siempre
entablan un diálogo, pero también hay una resistencia crítica”, añade Balcázar.
Por su parte, Alejandrez admite que Francia
es su eje porque ambos estudiaron Letras Francesas en la Universidad Nacional
Autónoma de México (UNAM) y que apuestan por la traducción porque desean
proponer lecturas que los han hecho reflexionar, formar un público para éstas y
compartir sus emociones. “La cultura francesa tiene sus altibajos, sus crisis,
pero no deja de decirnos ciertas cosas”.
Reitera que sus intereses están representados
por las colecciones que abarcan la narrativa, ensayo, novela y también
documentos.
Finalmente, Melina Balcázar destaca que ha
sido interesante traducir y editar. “Nos leemos y editamos mutuamente. Tenemos
la visión misma de lo que será el texto publicado, cómo será para el lector, su
vida pública. Hay varios momentos que sí estamos a solas con el texto y la
lengua, pero siempre pensamos que tendrá una vida social”.
Entre las novedades para 2020 destacan dos
títulos de autores galos, uno sobre la mescalina y otro sobre la masacre de
Ayotzinapa llevada al Silicon Valley.