“Tasa global de incidencia de depresión”, emitido por la Secretaría de Salud federal, advierte que en la entidad que gobierna Mendoza Davis se registra una tasa de incidencia de 117.7 casos, por cada 100 mil habitantes
La Paz, Baja California Sur.- En Baja California Sur (BCS) se registra una incidencia de depresión “muy alta” entre sus habitantes, consecuencia, principalmente, de fenómenos como la violencia, migración y los desastres naturales; casos que orillan a los afectados, incluso, a suicidase.
El documento titulado “Tasa global de incidencia de depresión”, emitido por la Secretaría de Salud federal, advierte que en la entidad que gobierna Carlos Mendoza Davis se registra una tasa de incidencia de 117.7 casos, por cada 100 mil habitantes.
La cifra de BCS dobla la medida global, que se ubica en 58.13 casos por cada 100 mil habitantes; “es decir, una suma aproximada de 69 mil 750 casos diagnosticados anualmente por este padecimiento en todo el mundo”.
Ante este panorama, la secretaría de Estado, que dirige el doctor Jorge Carlos Alcocer Varela, agrega que la situación se agrava entre los jóvenes, quienes son los más vulnerables a realizar acciones extremas y atentar contra sus vidas.
“Quienes enfrentan niveles de prevalencia más altos de depresión y trastornos de ansiedad que, entre otras cosas, son causa de las altas tasas de incidencia de suicidio registradas en personas jóvenes (8 por cada 100 mil jóvenes)”, señala.
La misma secretaría de Estado, de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, recomienda al gobierno de Mendoza Davis a alinear su política de salud pública de acuerdo a lo previsto en el Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024.
“Se debe promover la salud mental los mexicanos con carácter de prioridad, particularmente en la población adolescente y joven”, señala el doctor Alcocer Varela en el informe, al que incluye a la ciudad de México, Morelos, Chihuahua, Durango, Nayarit y Colima, por arriba de BCS.
“La expansión tanto de la cobertura, como de las prestaciones y servicios públicos tendría un impacto presupuestal importante, que requerirá garantizar las fuentes de financiamiento, la eficiencia en el gasto social y crear las condiciones de crecimiento económico necesarias para la sustentabilidad del sistema”, explica.
En entrevista con Diario El Independiente, el doctor Fernando Aviléz Tostado, quien preside la fundación No Más Negligencias Médicas, afirmó que la “situación es muy delicada con el incremento de los trastornos mentales”.
“Afectan la calidad de la salud de los mexicanos, por lo que se debe redoblar los esfuerzos para evitar que los factores sociales, biológicos y de seguridad provoquen una inestabilidad de la salud mental de la población”.
Invitó a la administración del gobernador Carlos Mendoza Davis a “fortalecer y garantizar un entorno social seguro, de salud, de paz y de estabilidad económica que lleve a las familias mexicanas a un bienestar social que transforme y les permita acceder y tener calidad de vida”.
Por su parte, Silvio Octavio García Rodríguez, quien preside la Confederación Nacional de Profesionistas y Jóvenes de México (Conapro) recordó a este diario, a manera de ejemplo, los sismos de 2017.
“Este fenómeno de la naturaleza provocó secuelas psicológicas entre sus habitantes quienes sufrieron el embate de la naturaleza. Por ello, es necesario que las autoridades del sector salud realicen campañas de salud mental y física para atender a niños, adolescentes y adultos. Urge hacerlo”, dijo a este matutino.
Cabe destacar que la salud es un derechos consagrado en el marco legal internacional, donde México ha suscrito en el catálogo de Derechos Humanos desde la Organización de las Naciones Unidas (ONU).