Ciudad de México. La existencia de falsificaciones en el arte no es un tema nuevo. En la exposición Originalmentefalso, el artista Gabriel de la Mora encara ese problema y cuestiona conceptos de la práctica artística, como originalidad, autoría y falsedad.

Originalmentefalso, primera exposición de este año del Museo Nacional de Arte (Munal) a cargo de Carmen Gaitán, adentrará al visitante al complejo submundo del mercado negro del arte y descubrirá cómo se da el tránsito de un falso a un original de Gabriel de la Mora, quien interviene obras apócrifas atribuidas a renombrados artistas mexicanos y extranjeros.

Para transformar las piezas, De la Mora (Ciudad de México, 1968) recurre a procesos físicos y químicos que dan como resultado objetos nuevos, propiamente originales, donde la obra inicial resulta irreconocible por completo. Además de alterar la configuración inicial de los objetos, el proceso de metamorfosis trastoca los discursos de enunciación que éstos lucían y da posibilidad a que surja una reflexión propositiva de las categorías artísticas más clásicas.

El proyecto surgió hace 10 años con la serie homónima realizada por el artista, a quien le interesa cuestionar y encontrar nuevas posibilidades a la pintura, al dibujo y a la escultura.

En su propuesta artística, De la Mora comenzó a cuestio-nar la autenticidad, la originalidad y la autoría. ¿Cuántas obras originales serán falsas? ¿Cuántas falsas serán originales? ¿Qué es la originalidad? ¿Qué nos hace originales para generar objetos o ideas? ¿Qué es una copia? Las anteriores fueron las preguntas que se planteó el artista al iniciar la serie Originalmentefalso.

En entrevista, el artista, quien ha expuesto en museos y galerías de México, Estados Unidos, Canadá, Colombia, Brasil, España y Reino Unido, explica: Es peligroso generar arte con arte o arte con otros autores y otros artistas; creo que este proyecto responde a esa cuestión. Las técnicas y posibilidades de la pintura que aparecieron a raíz de acceder a restauradores y alquimistas, a obras falsas, ha sido espectacular y abrió otras subseries.

La búsqueda de falsos ha sido un trabajo continuo de De la Mora, y esas piezas han nutrido un archivo/colección de apócrifos que resguarda junto con otros sorprendentes objetos en una bóveda.

La muestra propone un diálogo con la colección del Munal. Se presentan 62 obras, de las cuales 34 son falsos que el artista transformó en originales para reinsertarlos en el mercado; 15 son cuadros originales del recinto, y 13 son piezas apócrifas que forman parte del archivo Originalmentefalso, y que en la exposición siempre están en vitrinas.

Entre las piezas falsificadas de renombrados artistas destacan de José María Velasco, Ernesto Icaza, Gerardo Murillo Dr. Atl, Frida Kahlo y Leonora Carrington.

En una de las salas, De la Mora presenta el caso de los libros Finding Frida Kahlo y El laberinto de Frida Kahlo que reproducen fotográficamente falsificaciones de la artista. El expositor borró las imágenes apócrifas impresas; el resultado fue que los libros quedaron con recuadros en blanco y encapsuló el residuo de la goma coloreado por el roce con las fotografías, imágenes que devinieron ausencia.

El problema de los falsos se origina cuando hay coleccionistas, gente que está dispuesta a comprar obras de cierto autor y muchas veces es difícil encontrarlas o son demasiado caras; incluso hay falsificaciones de falsificaciones, comparte a La Jornada el artista, quien estudió una maestría en pintura en el Pratt Institute de Nueva York.

La exposición, con curaduría de Abraham Villavicencio, ofrece al visitante una relectura de la colección del Munal. En cuatro espacios abordamos distintos aspectos, tanto de la importancia histórica y estética de los acervos que resguarda el museo como de los procesos creativos que han motivado a Gabriel a realizar una investigación constante, explicó el curador.

De manera paralela a la muestra se realizará una ponencia magistral con De la Mora y dos conversato-rios con distinguidos investigadores.