• También hubo mucha violencia contra los migrantes indocumentados y mujeres, sumado al grave entorno de homicidios, alertó la organización
Ciudad de México. En 2019, México fue uno de los países más
peligrosos para la prensa, al tiempo que también hubo un escenario de violencia
contra los migrantes indocumentados y las mujeres, el cual se suma a un grave
entorno de homicidios, alertó la organización de derechos humanos Amnistía
Internacional (AI).
En su Informe Anual para las Américas 2019,
AI destacó que las autoridades mexicanas detuvieron a 186 mil 750 migrantes en
situación irregular y deportaron a 123 mil 239. De los deportados, el 98 por
ciento procedía de Centroamérica, y casi la mitad de Honduras.
Sumado a la anterior, durante 2019 las
autoridades estadunidenses obligaron a más de 59 mil solicitantes de asilo a
regresar a México y permanecer allí mientras se examinaban sus solicitudes, un
proceso que puede durar meses o años.
En este contexto, el gobierno de México
mantuvo recluidos a más de 51 mil 999 menores en centros para inmigrantes, lo
cual es contrario a la legislación del país.
“En su primer año, el nuevo gobierno adoptó
un enfoque de las cuestiones migratorias basado en la seguridad, en el que
utilizó a la Guardia Nacional para capturar a personas migrantes. Además, tomó
preocupantes decisiones respecto a la seguridad, incluida la creación de una
Guardia Nacional formada principalmente por elementos militares”, señaló AI en
su reporte.
De igual forma, “el número de desapariciones
denunciadas aumentó a más de 61 mil 637. Persistía la violencia contra las
mujeres, con mil 006 investigaciones abiertas sobre feminicidios y continuaron
el acoso y los homicidios contra periodistas y defensores y defensoras de los
derechos humanos.
Con respecto al tema de la libertad de
expresión, AI advirtió que “México fue uno de los países más mortíferos para
los periodistas, con al menos 10 muertes violentas en 2019”.
El país también “sufrió una cifra récord de
homicidios, pero continuó con las fallidas estrategias de seguridad que había
utilizado en el pasado: creó una Guardia Nacional militarizada y aprobó una
alarmante ley sobre el uso de la fuerza”.