San José del Cabo, Baja California Sur-. Un grupo de ciudadanos asentados en diversos terrenos de la cabecera municipal San José del Cabo (SJC) denunciaron a través de los medios de comunicación posibles actos de corrupción llevados a cabo por representantes del Fideicomiso Fondo Nacional de Fomento Ejidal (Fifonafe) en Baja California Sur (BCS).

Despojo, abuso de autoridad, corrupción fueron los calificativos que el señor Daniel Fisher, originario de Los Cabos denunció, ya que aseguró que el representante del fideicomiso en el estado está vendiendo de manera ilegal predios que ya cuentan con escrituras de parte de particulares.

“Juan Javier Castro Cosío, esta persona se ha encargado de hacer una serie de conflictos de interés en el municipio. Él está vendiendo propiedades que ya fueron escrituradas desde 1978 y las está volviendo a vender” explicó el señor Fisher.

Indicó que incluso están revendiendo dichas propiedades en valores muy por debajo del real, por lo que convocó a todas las personas que atraviesan situaciones similares a la de él para hacer un frente común y denunciar dichas irregularidades, manifestó Daniel Fisher.

Explicó que han sido casi 18 las personas que denuncian el mismo problema, por lo que pide de manera urgente que la federación tome en cuenta dichas denuncias públicas y hagan algo para evitarlo.

El señor Fisher denunció también a Ignacio López Arreola y a otra persona, de la cual no supo decir su nombre, como operadores de la red de corrupción del Fifonafe en BCS.  

“Es la realidad de lo que pasa en Los Cabos, buscan clientes, quien sabe que tanto dinero habrá por abajo del agua, no quiero individualizar mi caso, son muchos los casos, el mío es un caso legal que voy a ganar, tengo la plena seguridad”, indicó.

Manifestó que no quiere que se haga un conflicto político con lo que está pasando, sin embargo, es importante que las autoridades competentes hagan lo necesario para evitar que historias similares se repitan, ya que se sabe que son muchas más las personas que de manera ilegal están perdiendo sus predios por medio del Fifonafe a pesar de que todos cuentan con las escrituras que los avalan como dueños legales.