Cabo San Lucas, Baja California Sur.- No fueron suficientes todos los esfuerzos de parte de la sociedad civil organizada para lograr que la Asociación Sudcaliforniana de Protección al Medio Ambiente y la Tortuga Marina (ASUPMATOMA) recuperara el acceso al Rancho San Cristóbal, el cual les fue despojado de manera irregular, por lo que se dio a conocer el cese definitivo de actividades, perdiendo así 23 años años de trabajo ininterrumpido en favor de la tortuga marina.

Fue en octubre del 2018 cuando se informó que derivado de un conflicto entre particulares, en el cual la asociación ambientalista no tiene nada que ver, se les prohibió el acceso, lo que afecta directamente al rescate, monitoreo y conservación de la tortuga.

En 1997 el dueño original del rancho donó el espacio a ASUPMATOMA, sin embargo, un conflicto de intereses desató una guerra por el espacio, dejando al descubierto una serie de irregularidades y malas prácticas de parte de autoridades, no solo de Baja California Sur (BCS), sino de otras partes del país.

Abilene Colín, directora de Proyectos de ASUPMATOMA, tuvo que anunciar tras todos los esfuerzos el cierre definitivo y cese de actividades. 

“Las circunstancias nos obligan a anunciar un cese de actividades, sepan todos que sí, nos han fracturado un brazo pero nunca nuestro espíritu”, explico con la voz entrecortada.

Agregó que solo piden que les den la oportunidad de continuar con la esencia del proyecto para beneficio de las familias y escuelas de la comunidad.

“Ojalá no tuviéramos que dar esta noticia, si un proyecto de conservación, con 25 años de historia puede quebrantarse de esta manera ¿qué le espera a las generaciones venideras, con qué ánimo les podemos pedir que luchen?”, agregó Abilene Colín.

Desconoce si el señor Antonio Schekaiban Assad, quien se ostenta como propietario, quería continuar con el proyecto, lo que sí es un hecho que es que las personas que forman parte de la asociación han sufrido una serie de atropellos, llegando incluso a acusarlos de delitos como tráfico de huevos de tortuga, una denuncia que fue desechada por las autoridades al comprobarse por medio de las investigaciones que fue infundada.

Finalmente el pasado 10 de diciembre de 2019 a menos de dos meses de terminar la temporada se llevó a cabo el desalojo judicial  lo cual podría poner en una situación de alto riesgo la vida de las tortugas y los nidos, siendo 30 los que tenían en protección aproximadamente. 

Hasta el día de hoy  2 biólogos están a la espera de la liberación de las crías que nazcan de los 30 nidos, dando así por finalizados casi 25 años de rescate de tortugas en el municipio de Los Cabos, siendo casi 1 millón las tortugas liberadas en más de 2 décadas.