• Aunque autoridades de la UNAM realizaron una investigación contra Jorge Cózatl, aún se desconoce el resultado de la pesquisa
CIUDAD DE MÉXICO.
La Academia de Música Antigua de la UNAM (AMA-UNAM) tendrá
su primer concierto de 2020 el sábado 25 de enero a las 13:30 horas,
titulado Sacrificios,
reinas y salvadores, bajo la dirección artística de Raúl Moncada,
quien realizó estudios de clavecín y clavicordio con Bob van Asperen, Menno van
Delft, y Siebe Henstra en Ámsterdam y Utrecht, en los Países Bajos.
Dicha obra está inspirada en los Pasticcios o composiciones musicales barrocas
hechas de la obra de varios autores y/o de distintas obras musicales y se
presentará en el Anfiteatro Simón Bolívar.
Sin embargo, hasta el momento la Coordinación de Difusión
Cultural de la máxima casa de estudios, que dirige el
escritor y funcionario Jorge Volpi Escalante, aún no ha informado si existe
algún avance en relación con las denuncias realizadas por integrantes de esta
academia (Excélsior,12/12/2019).
Esto, luego de que algunos músicos
suspendieran su asistencia a ensayos, cátedras y conciertos, desde el pasado
viernes 6 de diciembre, en protesta para exigir la destitución de su director
titular, Jorge Cózatl, debido a irregularidades y malos manejos en la
conducción de esta orquesta barroca de México, creada en 2017.
Hasta el momento sólo se tiene conocimiento de que las unidades de
Género y Jurídica de dicha coordinación realizan una investigación sobre dichas
denuncias, como lo informó en días pasados la oficina de Volpi, a través de un
breve mensaje en que se aseguró que “sólo proporcionará información hasta
que Difusión
Cultural cuente el avance de la investigación que se
realizará”.
De momento, la dependencia no ha emitido
alguna postura oficial ni ha concedido entrevista con el director de la
agrupación, Jorge Cózatl, para obtener su versión de los hechos, y se desconoce
la manera como se ha cubierto la ausencia de los músicos inconformes.
Entre las demandas, relatadas por los músicos
inconformes, señalaron que Cózatl no cuenta con especialidad en el campo de la
música antigua, dieron cuenta de sus constantes ataques de ira, acoso y el
cobro injustificado de clases.
También denunciaron la falta de seriedad en los
solistas y músicos invitados por Cózatl, el uso de lenguaje ofensivo,
discriminatorio y ridiculizante contra alumnos y el desprestigio hacia artistas
invitados, así como la implementación de un sistema punitivo de “descuentos
injustificados” y una larga lista de observaciones, tal como lo revelaron las
misivas obtenidas por este diario, suscritas por el clavecinista Arturo
Jiménez, la soprano Odette Sarabia y el contrabajista Carlos Javier Vázquez,
enviadas a Volpi Escalante desde diciembre pasado, acompañadas por otras cartas
de exbecarios que respaldan sus afirmaciones.