Lo derecho es lo decente
Muy buenos días
estimable lector, me siento bendecido y agradecido por Nuestro Señor
Jesucristo, ya que me permitió vivir un año 2019, en el cual compartí con mi
estimada secretaria LAURITA LIERA BETANCOURT, que sin ella no hubiera sido
posible redactar esta columna, que con gusto todos los jueves le brindamos a
Usted, su Periódico El Independiente,
inicia este año 2020 dando las gracias, muchas gracias por su aceptación,
deseando que todos sus proyectos se cristalicen para el bienestar familiar.
Dios los cuide y bendiga junto a todos sus familiares en estos 12 meses del
presente año, tiempo suficiente por si quieren cambiar de actitud, para no
maldecir a Dios, ni a los dirigentes de su Pueblo.
Inicio este año
brindando a Usted, una pequeña introducción del libro de los Proverbios, para
que obtenga una rica materia para reflexionar y profundizar el sentido de su
existencia “Sabiduría e introducción, no les interesan a los imbéciles” se
entiende que los conocimientos del hombre responsable lo hace participar de una
sabiduría muy superior que esta en Dios mismo, por esta razón el hombre debe
alimentarse de la palabra de Dios, fuente de la Verdad y Sabiduría. Proverbios
de Salomón, hijo de David Rey de Israel: para lograr sabiduría y educación,
para entender los sabios discursos, para obtener la instrucción e inteligencia,
para hacer al hombre Justo y Recto, para enseñar a los hombres sencillos
Prudencia; a los jóvenes Ciencia y Reflexión; para comprender proverbios y
secretos, los dichos de los sabios y sus palabras, que el sabio escuche, y
aumentara su saber y el inteligente sabrá dirigir a los demás, resumo, el temor
de Dios es fuente de sabiduría.
Para reflexionar y me
entienda más Usted; ¿Porque tienen suerte los malos y son felices los
traidores? Maldito el hombre que confía en otro, no hay nadie para hacerte
justicia, ni hay remedio que te sane, la alegría del malvado es breve y el
gusto del perverso dura solo un instante, si el mal era dulce en si boca, si lo
oculto bajo su lengua, si allí lo conservo y lo reactivo, y lo guardo en medio
del paladar, su comida se corrompe en el estómago y se vuelve veneno en su interior, ahora bien
desde que tengo uso de razón reconozco que los hombres se dividen en dos
grupos. Por una parte los sabios, que comprenden a los inteligentes, a los
astutos, a los buenos y a los hombres responsables. Por otra parte, los
insensatos, que abarcan también a los tontos, a los mentirosos y a los malos.
Vamos a meditar y
reflexionar, escucha hijo mio, la instrucción de tu padre, y no rechaces las
advertencias de tu madre, la sabiduría entrara en ti, la ciencia te vendrá a
recrear; el buen consejo velara sobre ti y la prudencia te cuidara. Así que no
te perderás en el mal camino, ni te juntaras con los hombres perversos que han
abandonado la senda recta y andan por veredas tenebrosas, que gozan en el mal
que han hecho y hacen alarde de sus fechorías, cuyos caminos son torcidos, e
infame todos sus pasos. Hijo mio, actúa en todo con prudencia y reflexión, no
la pierdas de vista, ellas te darán vida y te servirán de adorno. Sujeta mis
palabras en tu corazón, observa mis mandatos y vivirás feliz, procura adquirir
la palabra del Rey de Reyes.
Concluyo; seis cosas
hay que detesta Dios, y siete que su alma maldice: “ojos soberbios, lengua
mentirosa, manos que derraman sangre inocente, corazón perverso, pies que
corran hacia el mal, testigo falso que dice calumnias y el que siembra
discordia entre los hermanos. Para terminar esta columna me quedo con esta
reflexión. “que la gente sin instrucción aprenda la prudencia, y los que no
reflexionan se hagan razonables.”