• Descontrol en los cobros de los servicios que se ofrecen en las instituciones del nuevo Instituto de salud para el bienestar • Estos cobros aumentados al cien por ciento en algunos casos y otros más altos son un duro golpe a la economía • Conversaciones con el diablo
La
puesta en marcha del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) se ha vuelto
un caos y un dolor de cabeza, tanto para autoridades, directivos de hospitales
locales y federales, como para los pacientes que pertenecían al desaparecido
Seguro Popular. Aquí en la ciudad capital en el Benemérito y bi centenario Juan
Maria de Salvatierra es un reflejo de esto que digo. Y el principal golpe de
esta transmisión se da en el cobro de cuotas. Al amanecer del primero del año
se empezaron a cobrar las cuotas de una manera estratosferica. Las curaciones
que antes costaban ochenta pesos de pronto subieron a ciento sesenta pesos. Sin
ninguna explicación. Y el otro golpe fue la desorientación en los cobros de los
servicios a quienes pertenecen al desaparecido Seguro popular. Y esto se debe
creo a La falta de las nuevas reglas de operación, la carencia de información,
el cruce de órdenes y la falta de lineamientos es notoria en los hospitales
federales y estatales, que no saben si tienen que cobrar o no por atender a
quienes tenían el Seguro Popular, dado que no hay claridad de dónde saldrán los
recursos y presupuestos para tales fines.
Mientras
unos hospitales federales están cobrando la hospitalización y las cirugías a
todos los pacientes, otros no lo hacen hasta recibir indicaciones claras, pero
con el temor de que agoten su presupuesto si no les reintegran los recursos que
están gastando.
Esta
situación contrasta con la implementación del Seguro Popular en el 2004. En esa
ocasión la operación del nuevo programa se trabajó, se planchó, se operó y se
afinaron los detalles desde un año antes, precisamente para evitar que hubiera el
caos que ahora se vive.
El
problema central del Seguro Popular, que trajo muchos beneficios, reconocidos
internacionalmente, es que se corrompió y los recursos millonarios que se le
destinaron fueron robados o desviados para otros fines, principalmente en las
administraciones estatales.Por eso, ahora el Insabi regresa el control de la
atención de los más pobres al gobierno federal. Y en teoría eso suena muy bien.
• Estos cobros aumentados al cien por
ciento en algunos casos y otros más altos son un duro golpe a la economía
Digo
en teoría porque en la práctica el arranque de la puesta en marcha del Insabi
está fallando. Si las cosas siguen así, el Instituto va a ser el peor dolor de
cabeza, tanto para las autoridades como para las personas con menos recursos
que requieren de atención de todo tipo de enfermedades.
Este
día, Juan Ferrer, responsable del Insabi, dará el arranque oficial de este
nuevo Instituto en Chiapas, un estado que tiene muchas carencias en salud.
El
objetivo del Insabi es dar atención a 69 millones de mexicanos que no tienen
seguridad social. El objetivo es ambicioso. A tal grado, que se plantea
controlar las plazas del personal de salud en los estados para evitar
duplicidades o que se autoricen plazas sin el respaldo financiero como ocurría
antes.También se buscará que en algunos estados se formen redes integrales de
servicios de salud, donde se sumen todas las instituciones de salud, IMSS,
Pemex, Sedena y Armada para dar una atención médica en conjunto.Las autoridades
del Insabi piden paciencia, dicen que todo es gradual. Pero habría que
recordarles que las enfermedades no avisan ni tienen calendarios, se presentan
y hay que atenderlas.
• Conversaciones con el diablo
Voy
pasando por Chametla. Un enclave de segundas y yonkes. Hay viveros, un hotel de
cuatro estrellas y uno de los conocidos de paso, también de lujo, Hay carnitas,
escuelas, casas. Hay muchas cosas en Chametla. Pero también hay fé. En una
barda de una segunda, una mano desesperada pintarrajeo una leyenda; Necesito a
Dios en mi corazón. Una leyenda grande de acuerdo, creo a su angustia por tener
al creador cerca. Por lo pronto esa alma en pena, ya dio el primer paso;
reconocer la falta que nos hace en que creer...Sólo cuatro de los 32
gobernadores del país superan 60% de aprobación a su gestión. Se trata de
Mauricio Vila (Yucatán); Quirino Ordaz (Sinaloa); Carlos Mendoza (Baja
California Sur) y Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México,
de acuerdo con el ranking “Gobernadores y gobernadoras de México”, elaborado
por Consulta Mitofsky para El Economista.El gobernador de Yucatán obtuvo 78.8%
de aceptación; el de Sinaloa, 62.9%; el de Baja California Sur, 61.4%, y la
mandataria de la Ciudad de México, 60.2 por ciento.El ranking de Consulta
Mitofsky muestra que los mandatarios mejor posicionados, por partido y
calificación, son: Claudia Sheinbaum (Morena); Mauricio Vila (PAN) y Quirino
Ordaz (PRI). El único gobernador del PRD, Silvano Aureoles, de Michoacán, se
encuentra en la última posición del ranking con un respaldo ciudadano de 14.7
por ciento.Además de los cuatro gobernadores que obtuvieron una aprobación
mayor a 60%, los gobernadores de Chiapas, Rutilio Escandón, obtuvo 50.5%;
Francisco Domínguez, de Querétaro, 48.8%; Martín Orozco Sandoval, 47.3%; Diego
Sinhue, 46.4%; Adán Augusto, de Tabasco, 42.5%, y Miguel Barbosa, 40.9 %,
completan los 10 mejor calificados.Los que obtuvieron menos de 20% de respaldo
son: Cuauhtémoc Blanco con 18.6; Jaime Rodríguez, 18.3; Alfredo del Mazo, 16.5,
y Silvano Aureoles, 14.7 puntos... Yo si voy!
Yo
voy. Aunque sea arrastrando mis pies. Con 61 soles quemándome la espalda.
Cargando millones de recuerdos. Y capoteando de frente la ventisca disfrazada
de nostalgia, yo voy.Estos días: catorce y quince de febrero mi Secundaria ETA
184 llega al medio siglo. Y eso, es un festejo.
Ahí
estaré entre los copos de algodón del tiempo nuevo, añorando a los míos. Y con
el corazón abierto.
Falta
poco... Cuando voy a desayunar A La Católica, como ayer que me invitaron Jorge
y Alejandrino. Me siento como en México D.F. La Hostess, acomoda. Y como todos
los días esta full, hace uno antesala. ¿Cuál es el éxito de este lugar? Sirven
raciones llenadoras, hay buen café. Y los precios son para humanos. ¿Algo más?
Y
con esto nos despedimos. No olviden: hagan el bien y sean felices.