Cabo San Lucas, Baja California Sur.- Del 20 al 24 de enero una comitiva de Blue Flag visitó el municipio de Los Cabos para realizar una inspección y determinar si las 19 playas con el distintivo Playa Limpia se refrenda un año más.

Durante la inspección los miembros de la organización encontraron que uno de los mayores contaminantes de las playas del municipio son las tapas de refrescos, vidrios y colillas de cigarro, siendo este último uno de los más dañinos para el entorno ecológico. 

La organización Ocean Conservancy comenzó desde la década de los setentas a trabajar por la limpieza de playas de todo el mundo, dicha organización no gubernamental informó que desde el año 1986 que comenzaron con las campañas de limpieza hasta 2019 se habían logrado retirar más de 60 millones de colillas de cigarros.

Diversos estudios han determinado que las colillas de cigarros son sumamente contaminantes para los océanos, ya que los químicos que quedan en esos desechos son peligrosos para el medio marino, ya que al entrar en contacto con el agua suelta todas las sustancias contaminantes que absorbe de su humo, junto a eso desprende en el agua sustancias como la nicotina, el arsénico o plomo, las cuales al ser consumidas por los animales marinos provoca su envenenamiento, afectando también al ser humano al momento de consumir productos del mar. 

Una sola colilla de cigarro contamina hasta 50 litros de agua potable o 15 litros de agua de mar, de acuerdo a estudios de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Iztacala de la  Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). 

De acuerdo a Blue Flag México, en muchas de las playas del municipio de Los Cabos se encontraron varios desechos entre la arena, como vidrio y taparroscas, así como colillas de cigarros, siendo la playa Las Viudas, en Cabo San Lucas (CSL) una de las playas donde más se encontraron dichas sustancias.

Ante esta situación Blue Flag México solicita a la comunidad que visita las playas del municipio a mantenerlas limpias y no depositar su basura entre la arena, ya que es un gran contaminante, que más allá de generar la pérdida del certificado de playa limpia se afecta el medio ambiente, causando daños muchas veces irreversibles.