El Congreso del Estado concluyó este domingo el primer periodo ordinario del segundo año legislativo que presidió la diputada Daniela Viviana Rubio Avilés misma que fue ratificada para presidir también el segundo periodo de este año legislativo mismo que iniciará en marzo del próximo año 2020.

Esta decisión que tomaron los diputados ayer en sesión solemne, demuestra una vez más el poderío político que ha alcanzado el grupo de legisladores que encabeza la fracción parlamentaria “juntos haremos historia” que integran los diputados Héctor Pillado, Sandra Moreno, Carlos Van Wormer y Ramiro Ruiz.

La elección surgió luego de la votación de doce sufragios contra nueve.

Los diputados que encabezan Esteban Ojeda y Milena Quiroga quienes en esta ocasión contaron también con el apoyo de los legisladores del PES, Perla Flores y Rigoberto Murillo no pudieron alcanzar su pretensión de frenar la propuesta que encabezó la diputada Rubio Avilés.

La medida se tomó luego de que la ratificada presidenta del Congreso presentó su informe de actividades de lo que fue el primer periodo ordinario de sesiones y en el que una vez más la pérdida evidente de poder de los legisladores identificadas plenamente con el superdelegado Víctor Castro Cosío quienes de nueva cuenta salieron con las caras largas, molestos, irritados y evidentemente superados por la operación política de quienes una vez más ganaron la presidencia del próximo periodo ordinario de sesiones que abarca desde el 15 de marzo hasta el 30 de junio del 2020, un año eminentemente político.

Los legisladores que liderean Esteban Ojeda y Milena Quiroga, presentan cada día más estrecho su camino político hacia la toma de decisiones de su partido en cuanto a las candidaturas que estarán en juego a final del 2020 justamente para las elecciones del 2021.

Vale decir que hasta ahora la ambiciosa e iracunda Milena Quiroga, se mostraba muy entusiasmada con la posibilidad de ser candidata de Morena a la alcaldía de La Paz, pero todo parece indicar que será muy complicado para este partido, enviarla a competir por la alcaldía de la capital sudcaliforniana pues sus condiciones políticas en lo particular conforme pasa el tiempo se observan más truncas.

Molestos e irritados los llamados legisladores “puchistas” experimentaron una derrota política más por lo que la diputada Daniela Rubio fue electa para la misma posición que hasta ahora desempeñó.

De la misma manera estos legisladores ahora muy debilitados tampoco lograron la presidencia de la diputación permanente misma que inicia actividades este martes 17 de diciembre con la diputada panista Elizabeth Rocha que será la presidenta y que estará a cargo de la actividad del Congreso durante el periodo de receso que inició precisamente al concluir este periodo y que va del 15 de diciembre hasta el próximo 15 de marzo.

La diputada, Daniela Viviana Rubio Avilés, será la presidenta del segundo periodo ordinario de sesiones del segundo año de ejercicio constitucional de la XV legislatura, y contará con los diputados Carlos José Van Wormer Ruiz, secretario, vicepresidenta, Sandra Guadalupe Moreno Vázquez y prosecretario Ramiro Ruiz Flores.

Por su parte la diputada Elizabeth Rocha Torres presidirá la mesa directiva de la diputación permanente y será acompañada como primera secretaria de Anita Beltrán Peralta, segundo secretario, Rigoberto Murrillo Aguilar; primer suplente Maricela Pineda García, segundo suplente Lorenia Lineth Montaño Ruiz, tercer suplente Carlos José Van Wormer, cuarto suplente Sandra Guadalupe Moreno Vázquez y quinto suplente María Rosalba Rodríguez López.

Ambas planillas ganadoras y que fungirán durante el segundo período ordinario de sesiones ya del segundo año legislativo, fueron propuestas por el diputado José Luis Pérpuli Drew y quien fungió como vicepresidente del periodo que acaba de concluir, demuestra claramente que los legisladores que encabezaron los primero meses del trabajo legislativo ahora se encuentran totalmente minimizados, reducidos sin oportunidad alguna de recuperar la fuerza que en su momento ostentaron.

El Congreso inicia una nueva etapa en la que a querer o no, el trabajo legislativo del próximo año tendrá una connotación política inevitable que obligará a los legisladores no solo a brindar más y mejores resultados legislativos sino también a trabajar con la suficiente sagacidad y habilidad para que ese trabajo pueda sumarse a las pretensiones políticas naturales de cada uno de ellos como representantes populares.

¿No le parece así amable lector?