• El reto de los partidos políticos: perfilar candidaturas competitivas sin arriesgar la unidad interna. • Morena sin un liderazgo fuerte que congregue a militantes y simpatizantes para evitar así la dolorosa fractura • Se espera antes de que concluya este año que queden más a la visita los nombres de quienes buscan la candidatura de cada partido a la principal posición política de la entidad: La gubernatura
A poco más de dos semanas de
que concluya este 2019, se agudizan los objetivos de los diversos partidos en
el proceso político electoral del 2021, así que el reto para las respectivas
dirigencias estatales se centrará en impulsar las propuestas más competitivas
sin arriesgar lo que es una prioridad: La unidad partidista.
Está lao que ya a estas
alturas las dirigencias de los diversos partidos les resulta cada día más
difícil evitar que sus respectivos militantes que aspiran a ser candidatos, no
se muevan ya desde ahora.
Al contrario, está claro que
aspirantes a la gubernatura, alcaldías y diputaciones locales y federales, ya
están probando su capacidad de movilización y convocatoria entre sus
simpatizantes.
Hasta ahora los dirigentes de
los diversos partidos habían logrado mantener contenida este anhelo de quienes
consideran que pueden competir por las diversas candidaturas.
Donde es evidente que ha
resultado más complejo mantener la unidad es en Morena.
Ese organismo político se
encuentra sumamente confrontado al interior justamente porque nadie quiere
ceder a sus pretensiones.
No hay un liderazgo
suficientemente fuerte para que en torno a este se pudieran congregar
militantes y simpatizantes para evitar así la dolorosa fractura.
Los morenistas
sudcalifornianos se encuentran sumidos en un remolino de desconcierto que no
permite a estas alturas suponer que una vez más este partido repetirá la
historia de victoria electoral registrada en el 2018.
Por su parte el PAN, que será
justamente el principal opositor al partido de Morena en la entidad tiene ante
sí, el enorme reto de traducir a simpatía electoral los documentados aciertos
del actual gobierno estatal que encabeza el gobernador Carlos Mendoza Davis.
Los aciertos en las decisiones
del gobierno estatal, son reconocidas a nivel nacional por instituciones como
el INEGI pero habrá que realizar un trabajo adecuado desde el partido
blanquiazul previamente para que la población refrende con su voto la labor de
la administración blanquiazul.
Por supuesto que al mismo
tiempo, la dirigencia albiazul que encabeza Carlos Rochín tiene ya desde ahora
como premisa mantener la unidad interna sin dejar de permitir que los naturales
aspirantes a los diversos puestos de elección popular, hagan su propia labor
con la base militante.
La tarea no será nada
sencilla.
Así que al cierre de este año
y el inicio del 2020, el trabajo de organización interna de los mencionados
partidos será fundamental para salir a la calle en su momento a captar simpatía
de la población en torno a sus respectivas propuestas electorales.
Para muchos quizás parezca
tempranero tocar este tema, pero es evidente que las figuras visibles de estos
organismos políticos ya tienen en sus respectivas agendas la configuración de
candidaturas con la prioridad de no afectar sus respectivas estructuras.
El resto de los partidos como
el PRI y el PT seguramente están enfocados en analizar la posibilidad de las
estratégicas alianzas tanto con el PAN como con Morena precisamente para tratar
de mantenerse a flote ante la escasa capacidad de convocatoria que de manera
independiente tienen.
Algo similar sucederá con
partidos locales que han crecido muy poco y que se verán obligados a realizar
alianzas de facto con organismos políticos más fuertes.
Obviamente antes de que
concluya este año es posible que queden más a la visita los nombres de quienes
buscan la candidatura de cada partido a la principal posición política de la
entidad: La gubernatura.
Ya veremos qué sucede.